Santo Domingo.- Volar un avión que ha recibido uno o varios disparos es una experiencia que pocos pilotos comerciales han vivido. Y este lunes le tocó a la tripulación del vuelo NH951, de Spirit Airlines.
El avión, un Airbus A320 que tenía 48 pasajeros, fue alcanzado por siete disparos mientras aterrizaba en el aeropuerto Toussaint Louverture, de Puerto Príncipe, la capital de Haití, procedente de Fort Lauderdale, en Florida.
Para salir con bien de esta peligrosa situación propiciada por las pandillas en Haití, el avión cambió su rumbo. Como si doblara en U, así fue la trayectoria que siguió la tripulación para desviarse hacia el Aeropuerto Internacional del Cibao, en Santiago, República Dominicana.
En respuesta, la aerolínea envió otro avión, el NKS6001, para retornar a los 48 pasajeros y la tripulación a Estados Unidos. El vuelo partió desde República Dominicana hacia Fort Lauderdale a las 8:16 p.m. de este lunes.
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