París.- La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, reclamó ante la toma del poder por los talibanes en Afganistán que no se pongan trabas a la educación, en particular para las niñas y las mujeres que tanto se ha dedicado a promover allí.
«Nada debe obstaculizar el derecho fundamental a la educación, en particular para las niñas y las mujeres», declaró Azoulay en un comunicado de la Unesco.
La Organización de la ONU para Educación, la Ciencia y la Cultura aseguró que no escatimará esfuerzos para que todos los afganos tengan garantizado ese derecho, que es «indispensable para el ejercicio de los otros derechos humanos y para el desarrollo de Afganistán», en particular «en este periodo crítico».
Pidió que no haya ninguna discriminación, que estudiantes, profesores y personal de la educación puedan trabajar con seguridad y que las niñas y las mujeres puedan seguir aprendiendo «sin ninguna restricción».
«No se deben perder -afirmó Azoulay- los importantes progresos realizados en el país, sobre todo en materia de educación. Debe continuar la educación para las niñas y las mujeres. El futuro de Afganistán depende de ellas».
La organización recordó que desde 1948 ha prestado asistencia técnica para reforzar la educación en ese país, en particular para las niñas, y que gracias a la mayor campaña de alfabetización de su historia han podido beneficiarse 1,2 millones de afganos, de los cuales 800.000 mujeres.
Más recientemente, la Unesco ha reforzado los esfuerzos para hacer frente a la epidemia de covid con un apoyo al sistema educativo para que la vuelta a las clases en condiciones de seguridad, en particular para las niñas.