Las enfermedades del corazón están "subtratadas" en Latinoamérica, dice experto

"No tenemos la cifra precisa, el problema que nos está pasando con esta enfermedad es que está subdiagnosticada y, por obvias razones, subtratada.

Ciudad de Panamá.- Las enfermedades cardiovasculares están «subdiagnosticadas» y por tanto «subtratadas» en Latinoamérica, una región sin cifras precisas de pacientes con estas patologías, afirmó a EFE el cardiólogo mexicano Marco Antonio Alcocer.

«No tenemos la cifra precisa, el problema que nos está pasando con esta enfermedad es que está subdiagnosticada y, por obvias razones, subtratada. La cardiopatía isquémica es la principal causa de muerte en toda Latinoamérica», declaró Alcocer, quien es el Coordinador de Hemodinámica y Cardiología Intervencionistas del Hospital de Corazón de Querétaro.

El también expresidente de la Sociedad Mexicana de Cardiología participa en la Segunda Cumbre Ferrer Latam, que se celebra hasta este sábado en Ciudad de Panamá, junto con 350 médicos especialistas de Panamá, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Honduras, República Dominicana, Colombia, Bolivia Chile, Paraguay, Perú, México, Costa Rica y Argentina.

En el evento, los expertos hablaron sobre los últimos avances en cardiología, enfermedades pulmonares vasculares e intersticiales, neurología y gastroenterología, áreas en las que está focalizado el laboratorio.

FACTORES DE RIESGO: OBESIDAD, SEDENTARISMO Y TABACO

Alcocer apuntó que las enfermedades cardiovasculares «se presentan por culpa de no identificar ni controlar unas condiciones que se llaman factores de riesgo, que son algunas acciones que incrementan las probabilidades de enfermarse».

Entre estos factores de riesgo están los relacionados con la alimentación, como el sobrepeso y obesidad; con la ausencia de actividad física, como el sedentarismo y, por otro lado el tabaquismo.

También hay factores relacionados «con los niveles de grasa o de lípidos en la sangre, que es el colesterol» y «el azúcar, la glucosa elevada, que es la diabetes».

«Hoy por hoy en Latinoamérica, una de las catástrofes que estamos teniendo en nuestra población es que estamos teniendo una cantidad impresionante de diabéticos nuevos, que a lo mejor hace 10 o 20 años las cifras eran notablemente más bajas», alertó el doctor.

«APRENDER O RE-APRENDER A COMER»

«No hay que quedarnos con la idea de que es solo la alimentación, yo creo que en Latinoamérica podemos presumir que tenemos una riqueza en nuestra alimentación, y es parte de nuestra cultura», señaló Alcocer.

El experto destacó que «una persona puede ser súper disciplinada en su alimentación y aún así tener diabetes, problemas de colesterol y presión alta, y fumar».

Por ello, Alcocer considera que «un error decirle a la gente que deje su comida», y apuesta por «aprender en el sentido de las cantidades, ‘tips’ de como cocinar, combinar los alimentos, no solamente comer postres o grasas, sino buscar un mensaje de alimentación equilibrada».

«Es importante educar a la gente en aprender o re-aprender a comer. Siempre le digo a la gente: no dejes de comer lo que te gusta, pero no comas lo que comías», explicó el experto.

INFARTOS EN MUJERES: HORAS DE RETRASO EN LLEGAR AL HOSPITAL

«Históricamente la gente tenía la idea o el concepto de que (el infarto) es una enfermedad solo de hombres. Y con el tiempo hemos aprendido que en las mujeres también es un problema muy serio, y diría que más que en los hombres por varias razones», expuso Alcocer.

En las mujeres, los síntomas de infarto son más «atípicos», como «una expresión de ardor, a lo mejor ni siquiera tiene dolor, puede que solo tenga falta de aire».

Esto supone un retraso en el diagnóstico, pues «en el hombre, en media hora sé el diagnóstico porque se sintió mal y rápido fue a pedir ayuda».

Pero en la mujer «es quizás un ardor, no es nada, me voy a tomar algo para el estómago, respiré un poquito más agitado, voy a salir a tomar aire a la calle, y, a lo mejor, se retrasa ocho horas» en ir al hospital.

«El mensaje a las mujeres es que la enfermedad cardiovascular es muy peligrosa, hay que identificarla, no hay que confiarnos», destacó.