WASHINGTON.- Uno de los rehenes secuestrados en una sinagoga de Texas (EE.UU.) fue liberado este sábado en buen estado de salud después de más de seis horas retenido, mientras el FBI continuaba negociando con el sospechoso del crimen, informó la Policía local.
Poco después de las 17:00 horas locales (23:00 GMT), «un rehén de género masculino fue liberado sin presentar heridas», y se esperaba que se reuniera con su familia «lo antes posible», informó en un comunicado el Departamento de Policía de Colleyville, una ciudad situada a 43 kilómetros (27 millas) al noroeste de Dallas.
La Policía no aportó más detalles sobre el número de rehenes que quedan dentro o las circunstancias de la liberación de ese primer secuestrado, y aseguró únicamente que el FBI sigue negociando con el sospechoso.
De acuerdo con una fuente policial consultada por la CNN, al comienzo del secuestro había al menos cuatro rehenes dentro de la sinagoga de la congregación Beth Israel, en Colleyville, y uno de ellos era un rabino.
Según funcionarios estadounidenses citados por las cadenas CNN, ABC y NBC, el sospechoso asegura ser el hermano de la científica pakistaní Aafia Siddiqui, encarcelada en una base aérea estadounidense cerca de Colleyville
El secuestrador pide que liberen a su hermana, que cumple una condena de 86 años de prisión por haber tratado de matar a soldados estadounidenses y agentes del FBI mientras se encontraba detenida en Afganistán.
La toma de rehenes se produjo durante un servicio religioso en la sinagoga de la congregación Beth Israel, que se estaba emitiendo en vivo por la página web de la institución en Facebook, informó el diario local «Fort Worth Star-Telegram».
Más de 8.000 personas se conectaron al vídeo de la retransmisión en directo una vez que surgieron las primeras informaciones en redes sociales sobre lo ocurrido, hasta que finalmente la emisión se suspendió sin que la situación en el interior de la sinagoga se hubiera resuelto.
El vídeo no mostró lo que sucedía dentro del edificio, pero en él pudo oírse a un hombre enfadado que hablaba sobre la religión, insistía en que no quería herir a nadie y aseguraba que iba a morir, según el «Star-Telegram».
Antes de que el vídeo dejara de emitirse, se escucharon lo que parecían negociaciones por teléfono entre el sospechoso y los agentes, señala el rotativo.
El presidente estadounidense, Joe Biden, ha recibido información sobre la situación en Colleyville y se mantendrá atento al desarrollo de los acontecimientos en las próximas horas, dijo su portavoz, Jen Psaki, en su cuenta de Twitter.
El Departamento de Policía de Colleyville afirmó en su cuenta de Twitter que tenía un equipo de operaciones de élite SWAT desplegado en el bloque donde se encuentra la sinagoga, confirmó que había evacuado la zona circundante y pidió no acercarse al área.
El suceso ha provocado que se refuerce la protección policial en varias sinagogas e instituciones judías de grandes ciudades del país, como Dallas, Nueva York o Los Ángeles (California), para detectar cualquier posible amenaza antisemita derivada de lo ocurrido en Colleyville.