Los CDC de EE.UU. avalan una tercera dosis para personas inmunodeprimidas

El comité asesor para prácticas de inmunización avaló la dosis adicional de los sueros de Pfizer y Moderna, aunque no discutió la posibilidad de una segunda inyección de la vacuna monodosis de Johnson & Johnson al no disponer de suficientes datos.

WASHINGTON.- Un panel de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en EE.UU. (CDC, en inglés) recomendó este viernes una tercera dosis de las vacunas contra la covid-19 de Pfizer y Moderna a las personas inmunodeprimidas, que ya fue autorizada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, en inglés).

El comité asesor para prácticas de inmunización avaló la dosis adicional de los sueros de Pfizer y Moderna, aunque no discutió la posibilidad de una segunda inyección de la vacuna monodosis de Johnson & Johnson al no disponer de suficientes datos.

Se espera que después de la recomendación de los expertos, la directora de los CDC, Rochelle Walensky, dé en las próximas horas su aprobación final a la administración de una tercera dosis, lo que podría comenzar este mismo fin de semana, indicó el diario The Washington Post.

Este periódico informó que el director del Centro de Evaluación e Investigación Biológica de la FDA -encargado de supervisar las vacunas-, Peter Marks, aseguró al panel que las dosis adicionales parecían «moderadamente eficaces» para proteger a los pacientes.

Este jueves, la FDA había dado vía libre a la administración de una tercera dosis de las vacunas contra la covid-19 a un «grupo pequeño» de gente, formado por receptores de trasplantes de órganos o «aquellos a quienes se les diagnostica condiciones que se considera que tienen un nivel equivalente de inmunodepresión».

La FDA enmendó así sus autorizaciones de emergencia para estas dos vacunas, que aún no están formalmente aprobadas aunque se utilizan desde diciembre de 2020, para que pueda administrarse esta tercera dosis.

Medios locales revelaron que algunas personas en Estados Unidos están aprovechando la falta de controles rigurosos para recibir una tercera dosis sin que esté aprobado ni recomendado por las autoridades.

Estados Unidos se une así a otros países europeos e Israel, que han anunciado que en las próximas semanas empezarán a administrar una tercera dosis a población de riesgo.