REDACCIÓN.- Madonna se tomó un momento durante su espectáculo en el Sportpaleis de Merksem en Bélgica para hablar de la infección bacteriana que la mantuvo en un estado muy delicado a principios de este año.
La estrella del pop expresó con profunda emoción su asombro por estar viva, retrasando el inicio de su presentación una hora debido a que se sentía débil en el momento.
“Hace menos de cuatro meses estaba en el hospital, inconsciente, y la gente pensaba que quizá no sobreviviría. Es un puto milagro que esté aquí ahora mismo. Mi madre, que Dios la bendiga, debe estar velando por mí, Y me dieron otra oportunidad, así que estoy muy agradecida por ello. Debo decirles que ahora no me siento muy bien, pero no puedo quejarme, porque estoy viva. Gracias a Dios por mis hijos y por todo su amor y apoyo”, dijo Madonna envuelta en lágrimas frente a sus miles de aficionados en Bélgica.
La cantante se había referido brevemente a su enfermedad durante el reciente ciclo de cuatro presentaciones en la histórica Arena O2 de Londres. No obstante, en su último espectáculo, Madonna profundizó más acerca de su padecimiento, informando a sus seguidores su dificultad para mantenerse en pie por la enfermedad que aún la aqueja.
“Me rompe el corazón ver lo que está ocurriendo en Israel y Palestina. Me rompe el corazón ver sufrir a los niños, a los adolescentes, a los ancianos. Todo ello me rompe el corazón, ¿de acuerdo? Estoy segura de que están de acuerdo. Aunque se nos rompa el corazón, no se nos puede romper el espíritu”, declaró Madonna durante el arranque de su gira en Londres. Previamente, la cantante había generado una gran controversia por reiterar su apoyo total a Israel, haciendo que muchos usuarios se pronuncien a favor del pueblo palestino que también se ha visto afectado por el conflicto armado.
Madonna, cuyo nombre completo es Madonna Louise Ciccone, fue criada en un hogar católico. Sin embargo, en la década de los 90 comenzó a tener un fuerte interés en la Cábala, una antigua tradición judía. Fue introducida a estas enseñanzas místicas judías por su amiga, la actriz de comedia Sandra Bernhard y su pasión por esta tradición fue tan grande que adoptó el nombre hebreo de Esther. Con frecuencia se la ve llevando una pulsera roja, un amuleto cabalístico que se cree que protege contra el mal de ojo, y aunque su conexión con la Cábala ha generado cierto debate y controversia, Madonna no se identifica formalmente como judía.
A pesar de su condición de salud, Madonna ha continuado con sus actuaciones, mostrando un compromiso inquebrantable con su carrera y sus fans. Su lucha contra la infección bacteriana y su firme postura en los problemas globales refuerzan el impacto y la relevancia de esta estrella mundialmente reconocida. El verdadero alcance de su influencia y su tenacidad ante los desafíos son un testimonio del potente mensaje que Madonna continúa transmitiendo a lo largo de su carrera.