Redacción Deportes.- Eugene Edward ‘Mercury’ Morris, legendario corredor de los Miami Dolphins invictos de 1972 y dos veces campeón del Super Bowl de la NFL, falleció a los 77 años, informó este domingo el equipo.
«Estamos profundamente entristecidos por el fallecimiento del gran ‘Mercury’ Morris, dos veces campeón del Super Bowl y querido miembro del equipo perfecto de 1972. Morris dejó un impacto duradero a través de su juego dinámico, personalidad y actuaciones que rompieron récords. Amaba a los Dolphins, a los fanáticos y a la comunidad del sur de Florida; siempre será recordado», escribió el equipo en un comunicado.
Morris fue un elemento fundamental en los Dolphins de la década de 1970 que triunfaron en los Super Bowls VII, el único que un equipo de la NFL ha culminado con campaña perfecta de 17-0, y en la edición VIII.
«Nuestros corazones están con su familia, seres queridos y compañeros de equipo mientras honran su vida y lamentan su fallecimiento», complementaron los Dolphins.
En aquella campaña de 1972, Morris corrió para 12 anotaciones, fue líder de la liga, y terminó con 1.000 yardas. Fue su única campaña de 1.000 yardas que significó junto con su compañero Larry Czonka, que corrió para 1.117 yardas, formar el primer dúo que acumuló 1.000 yardas en la historia de la NFL.
El nacido en Pittsburgh, Pennsylvania, un 5 de enero de 1947 brilló en el fútbol colegial con West Texas A&M. Recibió el apodo de ‘Mercury’ por su rapidez y gran capacidad atlética.
Llegó al fútbol americano profesional seleccionado por Miami en la tercera ronda del Draft AFL-NFL de 1969, una temporada después de que los Dolphins reclutaran a los corredores Larry Czonka y Jim Kiick. Este trío conformó una de las salas de corredores más formidables en la historia de la liga.
Entre 1971 y 1973, Morris fue seleccionado a tres Pro Bowls consecutivos, tiempo en el que el equipo jugó tres Super Bowls; perdió el VI, de la campaña 1971 ante los Dallas Cowboys, para luego salir victorioso en el VII, 14-7 contra Washington Redskins, y en el VIII, 24-7 ante Minnesota Vikings.
En 1975 jugó su último año para Dolphins antes de ser traspasado a San Diego Chargers, con los que sólo actuó la campaña de 1976.
En 1982, Morris tuvo problemas con la ley. Fue condenado por tráfico y posesión de cocaína. En un principio recibió una sentencia de 20 años en una prisión estatal, condena que fue revocada para ser liberado luego de cumplir tres años tras un acuerdo de culpabilidad.
Tiempo después participó en un anuncio de servicio público en el que habló sobre su tiempo en prisión y se convirtió en un orador motivacional.
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