REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Una mujer burló la seguridad e irrumpió en la pista del aeropuerto de Canberra, en Australia, en un aparente intento de impedir que un avión de la aerolínea QantasLink despegara sin ella.
La fémina caminó cerca de la cabina en chanclas y con un teléfono en la mano, donde los pilotos, tras advertir su presencia, apagaron el motor de la aeronave. Según testigos, la mujer había perdido ese vuelo y esperaba poder abordarlo de ese modo. Finalmente, fue detenida y el vuelo se retrasó.