No conduce a nada bueno

La reciente manifestación pacífica de estos días le dijo al gobierno, a través del color amarillo, que no estaba de acuerdo con muchas cosas  de Leonel Fernández.  Es la primera vez que logran, de forma hábil, demostrar a todos su repudio a la política morada. Y lo hicieron con éxito.

Se han dado cuenta que las cosas no andan bien y se lo han dicho.  La juventud, quizás una de los jalones importante que apoya su política se les revolteo. No fue necesario quemar una goma ni tirar un tiro para que en el mundo de la noticia internacional tomara su tiempo para darla a conocer.  Lo importante es ver hasta donde serán capaces a dar otro paso efectivo como este.

La respuesta del poder no fue inteligente… dijeron mentiras y organismos internacionales y expertos en el ramo lo demostraron.   El protagonismo del presidente sufrió un duro revés.  La clase media, la que queda aun, y de clase alta  alzaron su voz.  En los últimos meses no pegan una, ni en el congreso, ni ministerios, ni nombramientos.

Podrán hipnotizar a muchos, pero no todos llegaran a roncar.

A los de arriba a los de la alta ya esto no le sabe bien.  Conocen más que nadie a los corruptos, a la corrupción que impera.  Saben que esto no conduce a nada bueno.