No hay guardia sin partido

Por más que rebusco entre los 48 gobernantes de esta historia, desde Santana hasta Leonel,  pasando, entre otros, por Báez, Lilís, Cáceres, Horacio, Juan Isidro, Trujillo, Bosch, Donald, Caamaño, Balaguer, Guzmán,  Jorge Blanco e Hipólito, no hay forma de encontrar un partido sin guardias ni un guardia sin partido o que no haya deseado casarse con la gloria. Lo que sí he encontrado, como hoy, es mucha hipocresía en la guardia y en los partidos. Y, si no, pregúntenle a Soto Jiménez, para no ir más lejos.