Oliverio Espaillat: "Las máquinas son el futuro del arroz en República Dominicana"

El experto en arroz analiza los desafíos tecnológicos, laborales y comerciales del sector, destacando el impacto positivo del decreto presidencial sobre los aranceles.

REDACCIÓN.- El ingeniero Oliverio Espaillat, agrónomo y experto en arroz, valoró como un acto de valentía la decisión del presidente Luis Abinader de emitir un decreto que preserva los aranceles sobre el arroz importado, salvo para 23,300 toneladas provenientes de Estados Unidos, que ingresarán con arancel cero.

Según Espaillat, esta medida protege la producción nacional frente a la amenaza de inundación del mercado con arroz extranjero, un riesgo que podría haber replicado experiencias negativas en países como Haití y Costa Rica.

Espaillat destacó que, pese a la presión del tratado DR-CAFTA, el gobierno logró un equilibrio que beneficia a productores locales, consumidores y la soberanía alimentaria. “El arroz es parte esencial de nuestra cultura y economía. Decisiones como esta reafirman el compromiso del gobierno con la producción nacional y con los más de 300,000 dominicanos que dependen directamente de este cultivo”, explicó.

Impacto tecnológico y laboral
El experto señaló avances importantes en la mecanización del sector arrocero en los últimos años, incluyendo el uso de drones para sembrar y fumigar, reduciendo la dependencia de mano de obra haitiana, cuya escasez ha sido un desafío constante. Sin embargo, enfatizó la necesidad de una mayor capacitación para pequeños productores y la implementación de modelos cooperativos que faciliten el acceso a tecnología avanzada.

Espaillat aseguró que la tecnificación, aunque costosa, es la única vía para mantener la competitividad del sector. “Ya no podemos depender de los métodos tradicionales; las máquinas son el futuro del arroz en República Dominicana”, afirmó.

Producción y estabilidad del precio
Pese a las fluctuaciones climáticas que afectaron los rendimientos en los últimos años, el ingeniero destacó que la producción nacional está garantizada, al igual que los precios del arroz, gracias a programas de financiamiento del Banco Agrícola y subsidios gubernamentales. Según Espaillat, el consumo promedio anual de arroz en el país es de 700,000 toneladas, y la cuota de importación cubierta por el decreto apenas representa 12 días de consumo.

Un sector resiliente
Espaillat subrayó la capacidad del sector arrocero para adaptarse a crisis pasadas, como la pandemia de 2020 y la crisis de fertilizantes de 2022, y expresó confianza en que con la tecnificación y el apoyo gubernamental, los productores dominicanos podrán enfrentar los desafíos futuros.

“Gracias a esta decisión presidencial, el arroz dominicano seguirá siendo un alimento asequible y de calidad en las mesas de los dominicanos”, concluyó.