Santo Domingo.- Sentado en la barandilla del elevado que conecta la avenida Winston Churchill con John F. Kennedy, un hombre amenazó con lanzarse tras asegurar que un agente de la DIGESETT le quitó su motor, momento en que supuestamente, este se trasladaba a buscar un dinero para la compra de dos pintas de sangre para su hija.
Manuel Antonio Soto, de 31 años, quien trabaja como motorista en la ruta de la Churchill, decidió bajar del puente luego de que Noticias SIN lo convenciera de que publicaríamos su denuncia.
Soto relató que la desesperación de tener a su hija, de 3 años, interna de gravedad en el Hospital General De La Plaza de la Salud, y necesitando que le realicen una operación de corazón abierto, lo llevó a infringir la ley al conducir por el elevado.
Aseguró que el hecho de que le quitaran su motor y no poder resolver lo de su hija, lo llevó a intentar acabar con su vida.