Santo Domingo.– El presidente de Colombia, Gustavo Petro, reveló en su cuenta de X (Twitter) que, gracias a la colaboración de la inteligencia policial colombiana, se logró la incautación de 9.5 toneladas de cocaína en República Dominicana.
Petro destacó que la droga provenía de grupos armados del Catatumbo, una de las zonas más afectadas por el narcotráfico en Colombia.
Este decomiso histórico, uno de los mayores realizados en territorio dominicano, ha provocado una reacción inmediata por parte de autoridades locales e internacionales. En particular, la Administración de Control de Drogas (DEA) de los Estados Unidos se unió a la investigación para rastrear el origen del cargamento y desmantelar la red criminal involucrada.
A mediados de diciembre, Louis D’Ambrosio, director de operaciones especiales de la DEA en Washington, sostuvo una reunión clave con el vicealmirante José M. Cabrera Ulloa, presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), para reforzar la colaboración binacional. Fuentes cercanas aseguran que el decomiso, llevado a cabo en el Puerto Multimodal Caucedo, fue el eje principal del encuentro.
“El apoyo de Colombia y la DEA ha sido crucial en este caso, que representa un gran golpe contra el narcotráfico transnacional”, declaró Cabrera Ulloa.
El Ministerio Público dominicano calificó la operación como “compleja” debido al alcance de la organización criminal involucrada, que tiene vínculos en Centroamérica, Sudamérica, el Caribe y Europa.
“Este cargamento, valorado en unos 250 millones de dólares, estaba destinado a Europa. A través de una cooperación internacional efectiva, se logró interceptarlo antes de que cumpliera su objetivo”, indicaba el Ministerio Público en un comunicado.
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