Santo Domingo.- Raúl Girón, mayor del Ejército, imputado en el caso de corrupción denominado Operación Coral, explicó este jueves ante el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que los aumentos de presupuesto, una de las formas de presuntamente estafar por cifras millonarias al Estado, en la investigación.
«Miguel Cancú Ramírez de Politur era el encargado de alterar los presupuestos. ¿Para qué y con qué fin? Bueno, dependiendo de lo que, en este caso, el señor Robiou se quisiera ganar dependiendo de un mes u otro. Miguel Cancú Ramírez tenía la obligación de entrar al sistema como contador de la institución y solicitar a presupuesto esos fondos adicionales. Eso no es algo como decirle de boca ‘Girón, yo me quiero ganar 10 millones más este mes’, no. El general Robiou y Núñez De Aza tenían que hacer una solicitud de presupuesto a Presidencia, solicitud de presupuesto que siempre venía aprobada porque el mayor general Adán Cáceres Silvestre hacía las gestiones para que eso así pasara. Esto debe quedar muy claro: el general Adán Cáceres Silvestre no solamente tiene que ver en el CUSEP, él tiene que ver en un 30-40% aproximadamente de las ganancias que dejaba para los superiores el CESTUR o Politur, que es lo mismo».
Según Girón, una vez llegaba esa solicitud que firmaban tanto el general Robiou como el coronel Núñez De Aza, en su calidad de gerente financiero, se debía ir a presupuesto para agenciar y diligenciar ese dinero que «siempre se aprobaba porque, como ya les expliqué, estaban todos sobornados».
«Al punto que la segunda de presupuestos, por instrucciones de Núñez De Aza, se le remodeló la casa completa, y eso está estipulado en los cuadres que se hacían por parte de todos los miembros de la gerencia para entregarle mes por mes al coronel Núñez De Aza», agregó Girón.
Añadió que para beneficiarse de los recursos del Estado usaban estrategias como el reclutamiento de personal como una forma de ampliar la partida presupuestaria de la institución.
«Para que ustedes entiendan de forma tácita esto, el general Robiou no podía decir ‘me quiero robar 10 millones’, no. ‘Vamos a incluir un equipo de reclutas’. Ese personal de reclutas, por la razón que sea, hacía siete millones, perfecto, pero el coronel Núñez De Aza tenía los mecanismos para que eso se subiese en tres, cinco, siete millones más en presupuesto. Entonces, el general Robiou tenía que enviar un listado de ese personal firmado a presupuesto: ‘Mire, para ese personal que está entrando a trabajar nuevo a Politur yo necesito ese dinero, esos millones’. Pero, ¿qué pasa? Una vez teníamos los fondos acreditados en Politur, se me ordenaba instruir a las cabezas recolectoras que buscaran el personal que iba a cobrar ese dinero. Cuando las cabezas recolectaban ese dinero, yo tenía, por orden, que mostrar ese personal para que lo aprobara Núñez De Aza. Si él entendía que ese personal no tenía problemas para cobrarlo, entonces se introducía en nómina», indicó.
En su declaración, Girón expresó que, pese a que ha sido señalado como el responsable de la estafa, todas las personas que alegan inocencia son los verdaderos responsables.
«¿Por qué yo digo esto, honorable magistrada? A mí se me ha acusado de que este entramado es de una sola persona, mío y solamente mío. Con eso que yo les estoy diciendo, lo que busco no es salpicar a nadie. Yo estoy haciendo mi medio de defensa porque yo estoy demostrando que las personas que se paran aquí a decir que no tienen nada que ver con eso son, justamente, las que tienen que ver con eso».
Acusación
El Ministerio Público presentó cargos por hechos de corrupción contra 48 personas, procesadas por defraudar al Estado dominicano con más de 4,500 millones de pesos a través del CESTUR y CUSEP.