BONAO.- Luego de más de 24 horas de búsqueda, fue recuperado en aguas de la presa Rincón, en la provincia La Vega, el cuerpo de la quinta víctima que fue arrastrada por la crecida del río Fula.
Según familiares de los fallecidos, las muertes de sus parientes ha dejado en evidencia la falta de regulaciones que tienen los negocios que funcionan en la ribera del afluente.
Se trata de Isauly Martínez, de 29 años, quien se encontraba desaparecida tras ser arrestada por el río Fula, fue encontrada, luego de permanecer más de 24 horas en aguas de la presa Rincón.
El viaje al río en busca diversión se ha tornado en una pesadilla para las cuatro familias, que exigen mayor control en el balneario, al punto que piden elimine la venta de bebidas alcohólicas.
Los 8 negocios que se dedican a las ventas de bebidas alcohólicas, en las orillas del río, no pagan un permiso para funcionar en lugar más que la basura al ayuntamiento de Sabana del Puerto.
“Nosotros no les tenemos nada regularizado aquí en el ayuntamiento”, indicó alcalde.
En tanto, comerciante indicó que ningunos de los establecimientos comerciales cuentan con salvavidas, y desafiando el peligro, han adecuado sus espacios con sillas, mesas y sombrillas dentro del balneario.
Aparte de los negocios que se encuentran en las riberas del río, en el otro extremo también hay unas 10 terrazas de expendio de bebidas alcohólicas.
Mientras, que otros comerciantes que no ofrecieron detalles frente a las cámaras dijeron que el próximo lunes se reunirán con la fiscalía, donde esperan llegar a un acuerdo para reabrir sus negocios.
