El gobierno dominicano autorizó el uso de la base aérea de San Isidro y el aeropuerto de Las Américas por aeronaves estadounidenses para operaciones logísticas
EE. UU..– El Gobierno dominicano autorizó recientemente el uso de espacios aéreos restringidos, incluyendo la base aérea de San Isidro y el aeropuerto internacional de Las Américas, por parte de Estados Unidos para operaciones de logística.
La medida fue anunciada durante la visita del secretario de Defensa estadounidense al Palacio Nacional, donde fue recibido por el presidente Luis Abinader.
La decisión ha generado un amplio debate entre distintos sectores políticos y sociales del país. Organizaciones de izquierda denunciaron que el mandatario violó la constitución y puso en riesgo la soberanía nacional al permitir la presencia de aeronaves extranjeras en territorio dominicano sin la aprobación previa del Congreso.
Según estos grupos, este tipo de acuerdos estratégicos deberían ser discutidos y aprobados por los legisladores, en cumplimiento de la legislación vigente.
Por otro lado, grupos nacionalistas y legisladores oficialistas defendieron la iniciativa, argumentando que la República Dominicana enfrenta un aumento en los casos de narcotráfico y que la cooperación con Estados Unidos puede contribuir a enfrentar este problema.
Recordaron que en 2003 se firmó un acuerdo de cooperación bilateral con Estados Unidos para fortalecer la lucha contra el narcotráfico y que la medida actual sigue la misma línea de colaboración estratégica.
Expertos en seguridad señalaron que el acuerdo no implica que la República Dominicana participe en operaciones militares ofensivas, sino que facilita el reabastecimiento y apoyo logístico para las actividades de Estados Unidos en la región.
A pesar de estas explicaciones, persisten cuestionamientos sobre el impacto a la soberanía y la necesidad de un debate público y legislativo más amplio.
Algunos opositores alertaron sobre los riesgos de que la nación pueda verse involucrada indirectamente en conflictos internacionales y enfatizaron la importancia de que la constitución sea respetada en la toma de decisiones de esta naturaleza.
Hasta el momento, se desconoce la duración del uso de estos espacios aéreos por parte de las aeronaves estadounidenses como parte del acuerdo de cooperación.
Las autoridades indicaron que se mantendrá la información actualizada a medida que se desarrollen las operaciones, mientras los grupos políticos continúan evaluando los alcances del acuerdo y sus posibles repercusiones para la soberanía nacional.