El sujeto, aparentemente ebrio y quien intentó besar por la espalda a la mandataria, fue detenido por el equipo de seguridad de la presidenta mexicana que, según videos, se mostró tensa tras el episodio.
Ciudad de México.- Un hombre acosó y tocó sin su consentimiento a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cuando la mandataria realizaba un breve recorrido a pie por el centro histórico, a escasos metros de Palacio Nacional.
El sujeto, aparentemente ebrio, intentó besar por la espalda a la mandataria mientras saludaba a ciudadanos. De inmediato, fue detenido por el equipo de seguridad de la presidenta, quien, según los videos difundidos, se mostró visiblemente tensa tras el incidente.
Sheinbaum tenía previsto asistir a la primera reunión nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, celebrada en la sede de la Secretaría de Educación Pública (SEP), ubicada a pocas calles de Palacio Nacional. Por esa razón, decidió trasladarse caminando por una zona de alta afluencia.
Durante el trayecto, en medio del bullicio del centro capitalino, el hombre aprovechó la cercanía de la multitud para acercarse a la mandataria. En cuestión de segundos, intentó besarla en el cuello y abrazarla por detrás. Los agentes de seguridad reaccionaron de inmediato, separándolo de Sheinbaum y poniéndolo bajo resguardo.
Hasta el momento, las autoridades no han informado si el individuo enfrenta cargos formales, pero el hecho ha generado un amplio debate sobre la seguridad y el acoso hacia las mujeres, incluso en los más altos niveles de poder.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el 15,5 % de las mujeres mexicanas ha sufrido acoso sexual, tocamientos, exhibicionismo o intento de violación, una cifra cinco veces superior a la de los hombres, que alcanza el 3,2 %.
Además, más del 70 % de las mexicanas mayores de 15 años ha experimentado algún tipo de violencia psicológica, física o sexual. Expertos y organizaciones de derechos humanos advierten que existe una cifra negra superior al 90 % de los casos, debido al miedo y la desconfianza que impiden a muchas víctimas denunciar.