Londres.- La antigua ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon aseguró este domingo que no ha hecho «nada malo» tras ser detenida e interrogada el pasado fin de semana en relación con supuestas irregularidades en el Partido Nacional Escocés (SNP).
Después de ser interrogada, la Policía escocesa puso a Sturgeon en libertad sin cargos y hoy la política regresó a su casa de Glasgow tras alojarse temporalmente en otro lugar.
«No puedo decir mucho ahora, lo que diré es reiterar la declaración que emití el domingo pasado, estoy segura de que no hice nada malo. Tengo la intención de regresar al Parlamento (escocés) a principios de la semana, entonces estaré disponible para preguntas», dijo la ex ministra principal a los periodistas que le esperaban.
«Por ahora tengo la intención de ir a casa y hablar con algunos familiares», agregó Sturgeon, y puntualizó que, si bien es una figura pública, también es «un ser humano que tiene derecho a un poco de privacidad y mis vecinos también tienen derecho a un poco de eso».
La Policía investiga desde hace dos años el destino de una donación de 600,000 libras (696.000 euros) entregados al SNP por activistas favorables a la independencia de Escocia.
Como parte de las pesquisas, los agentes registraron la vivienda de Sturgeon y las instalaciones del partido en Edimburgo el pasado 5 de abril. El marido de la política, Peter Murrell, también fue detenido hace unas semanas, interrogado y liberado sin cargos.
Además, la Policía confiscó una casa rodante, cuyo coste está estimado en 110.000 libras (127.000 euros), aparcado ante la casa de la madre de Murrell en Dunfermline (este de Escocia).
El pasado febrero, Sturgeon presentó su dimisión como líder del SNP (que apoya la independencia de Escocia) y ministra principal, y fue sustituida por Humza Yousaf.