Salen a subasta dos notas de Einsten que dejó a un mensajero como propina
La particular propina que dejó el científico judío alemán en el Hotel Imperial de Tokio en 1922 ha alcanzado ya en la subasta "online" los 10.400 dólares: 8.000 uno de los documentos y 3.400 el otro, un importe, como él predijo, muy superior al que se suele de dejar como gratificación por un servicio en un hotel.