Papa Francisco en un encuentro con 500 mujeres y hombres pobres de todo el mundo celebrado el viernes 12 de noviembre en Asís ha dicho que es tiempo ya de que se abran los ojos para darnos cuenta del estado de desigualdad en que tantas familias viven.
Ha advertido además que será un final triste para la humanidad si los líderes se empecinan en crear conflictos en vez de propiciar el diálogo y el encuentro para solucionar los graves problemas que afectan a la gente.
Para los empresarios y políticos, el conocido periodista Antonio Galdo acaba de publicar un libro en el cual plantea la cuestión de si la clase dirigente será capaz de tener la visión suficiente para conducir por el mejor camino a la sociedad.
Estos pensamientos se originan en Italia, y tienen validez para todo el mundo.
La crisis sanitaria desatada por el virus COVID 19 le ha quitado la ropa al cinismo y a la hipocresía en que se ha vivido durante estos tiempos, y ha puesto al desnudo las profundas diferencias sociales y económicas que sufren miles de millones de seres humanos.
La ausencia de una solidaridad efectiva, la falta de caridad, el egoísmo, es lo predominante.
Apliquemos esto también a la sociedad dominicana y muy especialmente a sus dirigentes políticos y empresariales.
En todas las organizaciones también deberá realizarse una autocrítica donde no cabe el cinismo, si es que pretendemos alcanzar o buscamos un presente y un futuro de libertad y auténtico desarrollo, bienestar y progreso para los pobres y todos los demás ciudadanos de este país.
Recibe las últimas noticias en tu casilla de email