Una ONG registra 130 violaciones a derechos de presos en cárceles cubanas en julio

CIUDAD DE MÉXICO.- La plataforma independiente Centro de Documentación de Prisiones Cubanas registró el pasado julio 130 denuncias de eventos represivos contra 94 reclusos en prisiones cubanas, según un informe divulgado este jueves por esa iniciativa.

La organización -con sede en México- señaló que del total de denuncias, procedentes de 40 prisiones cubanas, «108 implican alguna forma de acoso u hostigamiento hacia los reclusos, 42 se refieren a situaciones de salud y deficiente atención médica, 15 a procesos penales y administrativos».

Además, recogió 11 denuncias de golpizas y torturas físicas, 11 traslados dentro de los establecimientos penitenciarios u otras cárceles, más otros 27 tipos de violaciones a los derechos de los prisioneros, sancionadas en los instrumentos internacionales.

En específico, citó el caso de cuatro presos políticos como «víctimas de la mayor cantidad de acciones de hostigamiento», y refirió que de los 94 encarcelados a los que se les vulneraron sus derechos, ocho son mujeres y 86 hombres.

Las provincias con mayor cantidad de reportes fueron La Habana (30) y Mayabeque (14), en el oeste de la isla, y la Camagüey (21) en el centro-este.

Los centros penitenciarios que aparecen en el informe con el mayor número de violaciones son la habanera Combinado del Este (18), la de Guanajay (8) en la provincia Artemisa (oeste), así como la de la provincia oriental Las Tunas y la del municipio Quivicán, en Mayabeque (ambas con 7).

Detalló que las violaciones de derechos de los presos fueron cometidas por «22 funcionarios de prisiones, 6 jueces, 5 oficiales de la Seguridad del Estado, dos policías que fungieron como testigos en un juicio político y un recluso que acosa a prisioneros políticos bajo las órdenes de las autoridades».

Asimismo, dio cuenta de los casos de 27 reclusos quienes tienen en común la falta de medicamentos y de atención médica.

En el reporte mensual de la ONG se afirmó que los problemas de salud en las cárceles se agravan por «la pésima alimentación» y por la proliferación de enfermedades como el Oropouche, dengue (trasmitidas por la picadura de mosquitos), tuberculosis, diarreas, las plagas de insectos, el agua contaminada y las malas condiciones estructurales».