Violencia permitida, infancia afectada: una advertencia frente al castigo corporal
UNICEF pide a República Dominicana proteger a los niños contra la violencia, incluyendo el castigo físico en casa, durante vistas sobre el nuevo Código Penal.
Actualizado: 22 de Julio, 2025, 01:39 PM
Publicado: 21 de Julio, 2025, 01:28 PM
Santo Domingo.- El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en República Dominicana en 2024 efectuó un llamado urgente en las vistas públicas: el país debe proteger a los niños y niñas “contra cualquier forma de violencia”, incluyendo la comúnmente aceptada práctica del castigo físico en el hogar
Un marco legal que normaliza el maltrato
La organización se pronunció durante las vistas públicas sobre el nuevo Código Penal, alertando que el artículo 123 “sugiere […] que la violencia hacia niños, niñas y adolescentes en el hogar está permitida siempre que no represente un ‘patrón’ ni sea ‘reiterada’.
El organismo internacional advirtió que esta formulación envía un mensaje social peligroso: legitima castigos físicos esporádicos —por “educación”— y hace recaer en la víctima la carga de demostrar repetición, algo prácticamente imposible para menores.
Datos alarmantes y desigualdad de impacto
El 64 % de los menores (1–14 años) ha sufrido violencia física o psicológica de parte de sus cuidadores, cifra que escala al 70 % en niños de 3 a 4 años.
Se enfatizó que los más vulnerables son los más pequeños y los niños con discapacidad, debido a su menor capacidad para denunciar y la menor visibilidad de sus historias.
Consecuencias profundas, no solo superficiales
Numerosos estudios en neurociencia y psicología demuestran que el castigo físico:
- Afecta el desarrollo cerebral, en especial en los primeros años, reduciendo la capacidad de auto-regulación emocional y social.
- Aumenta el riesgo de ansiedad, depresión y baja autoestima, ya que el niño internaliza la violencia como norma afectiva.
- Instaura un ciclo intergeneracional de violencia: niños golpeados replican métodos autoritarios en futuras generaciones.
Voces que claman silencio y protección
En sus encuentros con adolescentes y jóvenes, UNICEF escuchó relatos desgarradores:
“Nos contaron historias de cómo se suele pegar por cosas que no están bajo su control… la sensación de injusticia y de desamparo… cómo esto se refleja en la degradación de su autoestima y su salud mental”.
Estos testimonios subrayan el impacto emocional profundo, más allá de cualquier molestia física, evidenciando el daño psicológico duradero que suelen padecer las víctimas.
Propuestas para avanzar hacia un cambio real
UNICEF insiste en que la crianza respetuosa no equivale a permisividad, sino a una disciplina con límites claros, basada en:
-Razón y sensibilidad, no en agresión.
-Amor y respeto a la dignidad del menor.
-Protección jurídica efectiva, eliminando excepciones en el Código Penal.
El organismo y el Comité de los Derechos del Niño recomiendan prohibir expresamente los castigos corporales en todos los entornos —hogar, escuelas, guarderías—, algo que el Estado dominicano aceptó en 2023 en Ginebra.
El momento de actuar: una invitación sin retorno
UNICEF apela a una revisión legislativa consciente:
El Senado y la Cámara de Diputados deben eliminar del artículo 123 cualquier excepción que emplace la violencia como herramienta educativa.
El sistema judicial, en caso de violencia infantil, no debería depender de patrones, sino proteger desde el primer indicio.
La sociedad en su conjunto tiene la responsabilidad de cuestionar normas culturalmente arraigadas que justifican el maltrato bajo la frase “es por su bien”.

