REDACCIÓN.– Wall Street cerró este viernes con fuertes pérdidas y el Dow Jones de Industriales retrocedió un 2,77 %, mientras que el Nasdaq cayó un 4,17 % en otra jornada negra para el sector tecnológico.
El gigante del comercio electrónico vio cómo le pasaba factura la gran apuesta que hizo por los vehículos eléctricos del fabricante estadounidense Rivian y registró pérdidas trimestrales por primera vez en siete años; también sus perspectivas de negocio parecen haber preocupado al mercado.
Los problemas de Amazon arrastraron hoy a otros grandes de Silicon Valley como Apple (-3,66 %), Microsoft (-4,18 %), Meta (-2,56 %) o Alphabet (-3,72 %).
En conjunto, el sector tecnológico retrocedió un 4,14 %, una caída mayor que el fuerte rebote que había experimentado un día antes.
También cayeron con fuerza las empresas de bienes no esenciales (-5,92 %) y las inmobiliarias (-4,9 %), con un mercado en el que muchos inversores se están deshaciendo de títulos que en los últimos años han logrado las mayores ganancias y que no hace tanto empujaron a Wall Street a máximos históricos.
Así, algunos de los grandes ganadores de la pandemia se han convertido ahora claros perdedores, con las tecnológicas como el ejemplo más representativo.
Según los analistas, los inversores están preocupados por las subidas de tipos de interés, el repunte de la inflación y la evolución en general de la economía estadounidense.
Entre los treinta valores del Dow Jones, las mayores pérdidas hoy fueron para Intel (-6,94 %), Salesforce (-5,28 %) y Walgreens (-4,78 %).
Honeywell (1,89 %) y MSD (0,12 %) fueron los únicos valores que acabaron la jornada en positivo entre esa lista.
Las dos grandes petroleras estadounidenses, ExxonMobil (-2,33 %) y Chevron (-3,16 %), registraron claras pérdidas en Wall Street a pesar de que hoy dieron a conocer unas cuentas trimestrales con grandes ganancias por la subida de los precios del crudo.
El petróleo intermedio de Texas cerró la sesión con una bajada del 1,2 %, hasta 104,09 dólares, y al término de la jornada en Wall Street el oro subía a 1.896,8 dólares la onza, la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años avanzaba al 2,926 % y el dólar retrocedía frente al euro, con un cambio de 1,055.
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