Cuántas contradicciones exhibe el ingeniero Miguel Vargas Maldonado con los alegatos que hace al resultado de la XXIX Convención Extraordinaria Ángel Miolán, que dio como resultado la proclamación del ingeniero Hipólito Mejía como el candidato oficial a la presidencia de la república por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD).
La Comisión Organizadora de dicha convención, además de integrada por personas pulcras, fue concensuada por los diferentes sectores a lo interno del PRD. Todos estuvieron de acuerdo con que los doctores Enmanuel Esquea Guerrero, Milagros Ortiz Bosch y Hugo Tolentino Dipp dirigieran el proceso.
El alegato que hace Miguel Vargas de que 200 mil peledeístas votaron a favor de Hipólito Mejía es fútil. La resolución número 1/28/02/11 establece que las revisiones llevadas a cabo por el centro de cómputos del PRD, las cuales suman unas 547 mil personas pertenecientes a otros partidos, resolutaron dentro de otras cosas que si al momento del sufragio dos miembros del centro de votación entendieran o expresaran dudas de que una persona de reconocida militancia en un partido político distinto al PRD, el voto será observado debiendo incluirse en el sobre de votación su cédula de identidad electoral o el documento que utilizó para votar según el reglamento. En caso de una negativa a entregar el documento, simplemente le debió ser negado el voto.
Entonces, si Miguel Vargas tenía sus delegados en cada centro de votación, ¿por qué razón sus representantes dejaron votar a los supuestos peledeístas o en su defecto le observaron el voto? ¿O acaso todos los delegados y representantes de Miguel ante cada centro de votación se le vendieron a Hipólito o simplemente esto nunca sucedió?
Analizando la triste comparecencia ante los medios de comunicación de Alfredo Pacheco, jefe de campaña de Miguel, en ninguna parte de sus alegatos estaba que los peledeístas habían votado a favor de Hipólito Mejía. Esto indica que al darse cuenta de que Mejía era el verdadero ganador de la convención, había que recurrir a otro ardid.
La realidad es que Miguel no sólo ha perdido la convención sino las perspectivas de futuro al incidentar un proceso cuyos resultados fueron un plebiscito de que el PRD se ha convertido en la verdadera opción de poder para las elecciones del 2012.
Me atrevería a admitir que 200 mil dominicanos no inscritos en el PRD votaron en la convención e incluso también votaron en las elecciones presidenciales del 2008 en contra de Miguel. ¡El mensaje está claro! Perredeístas y no perredeístas quieren que el PRD vuelva al poder pero sin Miguel.
