Brasilia. – El aeropuerto de la ciudad brasileña de Porto Alegre, severamente afectado por los temporales que azotan al sur del país, puede continuar con todas sus operaciones suspendidas hasta fin de mes, informó este lunes la empresa responsable de su gestión.
Las lluvias que desde hace una semana castigan al sur de Brasil ya han dejado al menos 84 muertos y 111 desaparecidos y han causado severas inundaciones en cientos de ciudades, incluida Porto Alegre, capital del estado de Río Grande do Sul, fronterizo con Argentina y Uruguay.
En esa misma situación se encuentra el aeropuerto Salgado Filho, cuyas pistas e instalaciones están totalmente inundadas desde el viernes pasado, cuando fueron suspendidas las operaciones aéreas.
La empresa Fraport Brasil, que gestiona ese aeropuerto, informó este lunes que las operaciones continuarán interrumpidas «por tiempo indeterminado» y emitió un aviso en el que señala que esa paralización puede prolongarse hasta el próximo 30 de mayo.
Las autoridades de Porto Alegre explicaron que, por el momento, los aviones que trasladan ayuda humanitaria hacia la capital podrán utilizar el aeropuerto del municipio vecino de Canoas, aunque este tampoco recibirá vuelos comerciales mientras dure la emergencia.
Las lluvias, que comenzaron a menguar este lunes tras una semana sin tregua, han afectado unas 840,000 personas de 345 municipios, que sufren con la falta de alimentos, medicinas y servicios básicos como luz y agua potable.
Los datos de la Defensa Civil local señalan que, de ese total, 121,957 personas se han visto obligadas a abandonar sus casas y trasladarse a recintos de familiares y amigos, mientras otras 19,368 están alojadas en albergues improvisados por las autoridades.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha creado un gabinete especial para enfrentar la crítica situación, que ha sido atribuida a las consecuencias de la crisis climática y los desórdenes que provoca en el medio ambiente. E