(Fuente Externa)
Redacción Agencias.- El cáncer en la sociedad se ha convertido en una enfermedad mortal, luego que esta se encuentra avanzada en el cuerpo humano, es provocada por un grupo de células que proliferan sin control y se multiplican de manera autónoma, invadiendo a distancia otros tejidos.
Ante este padecimiento, la alimentación es el factor más determinante para reducir las probabilidades de desarrollarlo. Muchos estudios han encontrado que la gente con cáncer tienen bajas cantidades de antioxidantes. En las vitaminas, minerales y alimentos enteros existen antioxidantes que previenen o neutralizan los radicales libres, protegiendo las células contra sus daños.
Los alimentos que debemos tener en cuenta a la hora de prevenir la enfermedad, son los siguientes:
Fibra: Reduce el riesgo de cáncer de colon y mama. Se encuentra principalmente en casi todas las frutas y verduras, granos enteros, salvado de trigo, leguminosas (habas, lentejas, etc.)
Soya: Reduce el riesgo de cáncer de mama y próstata. ¿Cómo actúa? Se aconseja sustituir los alimentos comunes con alimentos de soya como frijol de soya, tofu, sopa de miso, leche de soya, polvo de proteína de soya y yogur de soya.
Sulforafano: Reduce el riesgo de cáncer de colon, mama, estómago. Se encuentra principalmente en el brócoli, berro, col, coliflor y rábano.
Betacaroteno: Reduce el riesgo de cáncer de pulmón, estómago, mama y útero. Se encuentra principalmente en zanahorias, pimiento rojo, brócoli, espinaca, col, melón, naranja, durazno, mandarina, haba, maíz y yema de huevo.
Minerales: Reducen el riesgo de cáncer y se encuentran en frutos cítricos, vegetales verdes, ajo, cebolla, leguminosas, nueces, granos enteros, germen de trigo, soya, pescados, mariscos, aves, carnes bajas en grasa, lácteos, huevo e hígado.
Arroz integral: En Japón el arroz es objeto de numerosas investigaciones contra el cáncer. Retrasa la aparición del cáncer.
Berenjena: Por su color violeta, contiene sustancias anticancerosas que parecen proteger a las células de las mutaciones que provoca el cáncer.
Setas: Reducen el riesgo de cáncer de órganos reproductivos. ¿Cómo actúan? Las dos setas benéficas son el shiitake y el maitale, pues refuerzan el sistema inmunológico y disminuyen la producción de estrógeno en las mujeres.
Vino tinto: Reduce el riesgo de cáncer de piel, mama y tiroides. ¿Cómo actúa? Es muy saludable pero en cantidades moderadas (de una a dos copas por día), pues el exceso en el consumo de alcohol en general aumenta el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer.
Ácidos grasos Omega-3: Reducen el riesgo de cáncer de mama, próstata, colon y piel. Se encuentran principalmente en pescados azules o grasos (atún, salmón, sardina, anguila, arenque, caballa, trucha, hipogloso y bacalao).
Uvas: Las uvas con piel y semillas contienen antioxidantes como el resveratol que bloquean los agentes cancerígenos y el crecimiento de los tumores.
Miel: Tiene propiedades antisépticas, por lo que es útil para evitar las infecciones asociadas al descenso de la inmunidad que conlleva el tratamiento con quimioterapia.
