x

Aplanadora de Abinader-PRM inicia periodo de contrarreformas

Enfoque

Es inaceptable solo remendarla; por demás, en temas pocos trascendentes y a cargo de una asamblea legislativa moral y políticamente degrada.

Imagen sin descripción
Escuchar el artículo
Detener

La Comisión Bicameral propuso los lineamientos del proyecto ley mediante el cual se convocaría la Asamblea Revisora para establecer modificación en torno a cuatro temas: el candado o fórmula que limitaría la reelección a dos periodos consecutivos y nunca más… la reducción limitada del número de diputados, unificar las elecciones y reestructurar ministerios.

La aplanadora del PRM, manipulada desde el Palacio Nacional, tiene la decisión de aprobarla al vapor.

Esas propuestas de Abinader son esencialmente contra-reformas y tienen mucho de “engaña bobo”, de mercadología política y fanfarronería mediática.

  • La unificación de las elecciones, es volver a institucionalizar el arrastre.
  • El candado a la reelección es poca cosa, si ya han convertido en un artículo “petro” (piedra, inmodificable) el régimen civil, republicano y representativo; esto es, la llamada democracia representativa, que solo acepta reelegir el mismo sistema y facilita la reelección de los partidos del sistema.

En consecuencia, penaliza la democracia participativa, la democracia directa, prohíbe el socialismo, criminaliza el comunismo, y el poder popular.

  • La cuestión no es limitarse a reducir un poco el número de diputados, lo que procede es eliminar el Senado (entidad profundamente anti-democrática) y establecer un poder legislativo con una sola cámara.
  • La restructuración de los ministerios es de poca monta, carece de definiciones que garanticen eficacia y control social; participación democrática y políticas públicas destinadas al bienestar colectivo.

Procura “envaselinar” propagandísticamente el paquetazo fiscal con el tema de la supuesta austeridad gubernamental.

Con la decisión adoptada en el actual Congreso y la actitud predominante en su seno, nuestra nación está amenazada por dos peligros combinados: la continuidad de la Constitución vigente, con los remiendos que, sometidos a la Asamblea Revisora, sean aprobados a su manera por ella.

El pueblo así lo olfatea:

Es incomparable el clima y la esperanza que generaron el Gobierno presidido por Juan Bosch y el gobierno de la Revolución de Abril de 1965, ambos basados en la Constitución Democrática de 1963, con lo que ha pasado -y sigue pasando- en el país después de impuestas la Constitución balaguerista de 1966 y la leonelista del 2010; dos constituciones que han servido de base a la pérdida total de soberanía, la degradación del sistema político-institucional, la depredación ambiental y el incremento brutal de las desigualdades.

 Insistimos en que estamos ante dos peligros combinados, uno estratégico y otro coyuntural.

El peligro estratégico es la continuidad por mucho tiempo de la vigencia de la actual Constitución, con uno cuantos remiendos no trascendentes; lo que realmente implica la reproducción de nuestro país como neo-colonia sometida a un proceso mediante el cual, gran parte de sus riquezas, son constantemente saqueadas y depredadas por corporaciones extranjeras y tutumpotes criollos.

El peligro coyuntural-inmediato es la imposición, nueva vez, de la idea de convocar la asamblea revisora y mantener el secuestro de la Constitución por una partidocracia pervertida y un bloque social capitalista, pro-imperialista, absolutamente dominante.

Reiteramos:

Es inaceptable que sea ese congreso quien reforme.

Es inaceptable solo remendarla; por demás, en temas pocos trascendentes y a cargo de una asamblea legislativa moral y políticamente degrada.

El único cambio aceptable por esa vía, sería anular la Asamblea Revisora e incorporar la figura política-jurídica de la Constituyente por elección popular, con normas democráticas-participativas, incluyentes de los movimientos sociales; para así abrir la oportunidad de elaborar una nueva Constitución tipo la de 1963, que sirvió de base al Gobierno de Bosch y a la Revolución Democrática y Popular de 1965.

En este periodo tenemos que proponernos crear la conciencia colectiva y la capacidad necesaria del pueblo movilizado, para quitarle al actual Congreso o Asamblea Legislativa el poder usurpado al soberano sobre los cambios constitucionales y concomitantemente sembrar ideas que posibiliten impulsar la necesidad de un Proceso Constituyente, que concluya en una ASAMBLEA CONSTITUYENTE POPULAR, SOBERANA y PAERICIPATIVA, electa por el pueblo.

Comenta con facebook
Recientes
Contenido más reciente en Noticias SIN

Shakira anuncia las fechas de su gira «Las mujeres ya no lloran» en Latinoamérica

Los líderes del G7 condenan con firmeza el ataque iraní contra Israel

Mahatma Gandhi: “la violencia es el miedo a los ideales de los demás”

Presupuesto 2025: deuda, Educación y Salud se llevan la mayor parte del gasto público

Embajada dominicana inaugura primer mural dominicano en Washington

Siete soldados israelíes muertos en combate en el Líbano

Día Internacional de la No Violencia

ANDECLIP se reúne con SISALRIL para reformular impuestos de centros privados en reforma fiscal