SAN JUAN.- Las autoridades sanitarias de Bahamas pidieron a la población del archipiélago atlántico cooperación ante el incremento sin freno de casos de COVID-19, tras confirmarse en las últimas 24 horas 66 nuevos contagiados que elevan a cerca de 600 el total desde el inicio de la pandemia en marzo.
El ministro de Salud de Bahamas, Renward Wells, tuvo, incluso, que dirigirse al país, coincidiendo con el paso del huracán Isaias por la región, para pedir a los ciudadanos que ayuden a las autoridades ante el desbordamiento de casos, según informan este sábado medios del archipiélago atlántico.
Bahamas, que durante los primeros meses de la pandemia sufrió relativamente pocos casos de coronavirus, experimentó un alza preocupante desde que las autoridades de Nassau decidieron comenzar con la reapertura a principios del pasado mes de julio, en un intento por reactivar la actividad económica, muy dependiente del turismo.
El COVID-19 tiene focos ahora repartidos por diez islas del archipiélago y ha causado un total de 14 muertes.
Wells dijo que el rastreo de contactos es un paso necesario en la lucha contra el virus, ya que como aseguró se trata de una estrategia de salud pública probada en el tiempo que rompe la cadena de transmisión y limita la propagación de infecciones.
Reconoció, sin embargo, que el rastreo de contactos depende en gran medida de la responsabilidad individual.
«Les rogamos que no se nieguen a contestar llamadas, bloquearlas o perder contacto deliberadamente con los oficiales de vigilancia, además de no proporcionar información falsa de actividades si se les ha indicado que se aíslen o se mantengan en cuarentena», señaló el funcionario.
Wells dijo que según la información disponible en el Ministerio de Salud los casos asociados a la segunda ola de COVID-19 en Bahamas están relacionados con personas de la isla de Gran Bahama (área noroeste) que viajaron a Estados Unidos.
«Nuestra información también nos lleva a concluir que el aumento en el número de casos positivos de COVID-19 está relacionado con las actividades sociales, lo que incluye funerales, bodas y fiestas en el hogar», subrayó.
«Hay que hacer todo lo que podamos para minimizar los riesgos y mantenernos seguros, lo que requiere responsabilidad personal», dijo Wells, tras agregar que las personas no deben socializar con individuos con los que no viven.
Solicitó además que no se participe en actividades que no respeten los protocolos de distanciamiento social y el uso de mascarillas en todo momento.
Señaló que con la amenaza del huracán Isaías, el Gobierno ha relajado algunas restricciones para facilitar el paso del ciclón.
El ministro de Salud dijo que las personas deben usar mascarilla cada vez que salen de sus hogares y especialmente cuando estén cerca de otros individuos.
Sostuvo que esa es la única forma de aplanar la curva de contagio que sufre Bahamas.
Según el último informe de Sanidad, hay 66 nuevos casos de COVID-19, con 39 en Gran Bahama y 27 en Nueva Providencia, mientras que el resto se reparten por otras islas.
El número total de casos confirmados en Bahamas se eleva a 574 y un total de 14 muertes.
Hay además 19 pacientes que actualmente permanecen en hospitales y 467 casos activos.
Las autoridades de Nassau han completado un total de 4.286 pruebas de detección.