Rubio explicó que cuatro buques petroleros salieron sin sanciones, pero EE.UU. puede bloquear otros afectados.
El bloqueo petroleros Venezuela EE.UU. es firme según Marco Rubio, quien destaca la aplicación de sanciones contra buques.
Washington.- El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, advirtió este viernes que "no existe nada" que pueda impedir a la Administración de Donald Trump bloquear la entrada y salida de Venezuela de buques petroleros sancionados bajo la legislación estadounidense.
"No existe nada que vaya a impedir nuestra habilidad de poder enforzar (sic.) las leyes de Estados Unidos en términos de los buques que son sancionados", respondió en español durante una rueda de prensa de fin de año en el Departamento de Estado.
El jefe de la diplomacia estadounidense explicó que el jueves pudieron salir cuatro buques petroleros porque sobre estos no pesaban sanciones de Estados Unidos.
En la misma rueda de prensa, Rubio afirmó que el Gobierno de Nicolás Maduro es "un régimen ilegítimo" que coopera con terroristas y que la estrategia de Estados Unidos en Venezuela pasa por "defender los intereses" de Washington, aunque evitó precisar si el objetivo final es la caída del líder chavista.
Trump ordenó el martes bloquear la entrada y salida de Venezuela de todos los petroleros sancionados por Estados Unidos, una semana después de haber incautado un barco cargado con crudo cerca de las costas venezolanas.
Estados Unidos aumentó así la presión sobre el Gobierno de Nicolás Maduro, al que acusa de liderar el Cartel de los Soles, algo que Caracas niega, tras meses de bombardeos a supuestas lanchas del narcotráfico en el Caribe y el Pacífico.
Trump, que lleva semanas asegurando que "pronto" comenzarán los ataques contra el narcotráfico dentro de Venezuela, dijo en una entrevista publicada este viernes que no descarta una guerra con ese país.
Las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela se han deteriorado progresivamente desde comienzos del siglo XXI, especialmente tras la llegada del chavismo al poder.
En este contexto, Estados Unidos ha impuesto diversas sanciones económicas y financieras contra Venezuela, con énfasis en el sector petrolero, principal fuente de ingresos del país sudamericano.
Estas medidas incluyen restricciones a la comercialización de crudo, sanciones a empresas estatales y privadas, así como a buques y personas vinculadas a la industria energética venezolana. El objetivo declarado de estas acciones ha sido presionar al Gobierno de Nicolás Maduro para provocar cambios políticos internos.