Campamentos navideños: una alternativa para mantener rutinas y estimular el desarrollo infantil en vacaciones

Subrayó que los campamentos navideños no solo ofrecen entretenimiento, sino que también representan una oportunidad para apoyar el desarrollo infantil, detectar posibles dificultades y fortalecer el vínculo entre padres e hijos.

SANTO DOMNIGO.– Durante la temporada de vacaciones escolares, los campamentos navideños se han convertido en una opción cada vez más utilizada por las familias dominicanas para garantizar espacios seguros, estructurados y educativos para los niños, sin dejar de lado el juego y la diversión propios de la época.

Así lo explicó Gloria Molina, directora del Centro Conecta, durante una entrevista en El Despertador, donde señaló que esta modalidad surge como respuesta a la necesidad de las familias de preservar rutinas y ofrecer actividades con propósito durante el receso escolar.

“Los campamentos navideños buscan mantener cierta estructura, promover el aprendizaje y, al mismo tiempo, servir como un espacio de cuidado para los niños”, indicó Molina.

Aprender jugando, incluso en vacaciones

Según explicó, las actividades que se desarrollan en estos campamentos están diseñadas bajo un enfoque lúdico y temático, relacionado con las festividades navideñas, pero orientadas al desarrollo integral de los niños.

Entre las dinámicas se incluyen manualidades, juegos sensoriales, actividades de motricidad fina y gruesa, estimulación del lenguaje, cocina básica y ejercicios que fortalecen el desarrollo cognitivo y socioemocional.

“El niño aprende de manera innata a través del juego. Si las actividades se presentan de esa forma, los niños participan con entusiasmo, aunque estén de vacaciones”, afirmó.

Además del aprendizaje, estos espacios fomentan la socialización y el contacto con otros niños, aspectos clave para el desarrollo emocional en la primera infancia.

Uso limitado de pantallas en la primera infancia

Molina también abordó el uso de la tecnología, destacando que en el Centro Conecta se prioriza la reducción del tiempo frente a pantallas, especialmente en niños pequeños.

Recordó que la Asociación Americana de Pediatría recomienda cero tiempo de pantalla durante los primeros dos años de vida, y que, aunque el contexto actual es altamente tecnológico, el uso de dispositivos debe ser limitado y con fines educativos.

“Si se va a usar tecnología, que sea algo que realmente aporte al desarrollo del niño”, puntualizó.

Desde estimulación temprana hasta detección de alertas

Uno de los aspectos más relevantes de estos campamentos es su aporte en la estimulación temprana, incluso desde edades muy tempranas. En el caso de Conecta, reciben niños desde los tres meses hasta los siete años.

En los bebés, el trabajo se enfoca en la estimulación sensorial, la motricidad gruesa y el desarrollo del lenguaje, mientras se observan de cerca los hitos del desarrollo propios de cada etapa.

“El juego nos da muchas señales. A través de la observación podemos identificar alertas tempranas en el desarrollo del niño, como dificultades en el lenguaje, la comunicación o la respuesta a estímulos”, explicó Molina.

Indicó que señales como la falta de intención comunicativa, no responder al nombre o no emitir palabras básicas en edades esperadas pueden ser motivos para consultar a un especialista.

Una oportunidad para observar y acompañar

La especialista destacó que el periodo de vacaciones también permite a padres y madres observar con mayor atención el comportamiento de sus hijos, al contar con más tiempo y menos presión de la rutina diaria.

“Si algo llama la atención, lo ideal es ocuparse a tiempo y buscar orientación profesional”, recomendó.

  • Finalmente, subrayó que los campamentos navideños no solo ofrecen entretenimiento, sino que también representan una oportunidad para apoyar el desarrollo infantil, detectar posibles dificultades y fortalecer el vínculo entre padres e hijos.