REDACCIÓN.- El asesinato del segundo teniente de la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD), Junior Reyes Chalas, continúa generando más dudas que respuestas, a pesar de los avances anunciados por la Policía Nacional y el Ministerio Público. Aunque dos de los cuatro implicados han sido capturados, el caso todavía plantea interrogantes clave que las autoridades deberán resolver para esclarecer completamente el crimen que conmociona al país.
1. ¿Cuál fue el verdadero móvil del crimen?
Inicialmente, el hecho fue presentado como un asalto, reforzado por el despojo del arma de fuego y la cadena de la víctima, elementos típicos de un robo. Sin embargo, el desarrollo de las investigaciones y la participación de un capitán de la FARD, Fraylin G. Pérez Camacho, señalan que se trató de un acto dirigido. La pregunta es, ¿qué motivó el ataque? ¿Fue un ajuste de cuentas, un encargo personal o un conflicto interno dentro de la institución militar?
2. ¿Qué rol específico tuvieron los prófugos?
Los prófugos identificados, Tommy Antonio Ortiz, alias “Jhonci el Mecánico”, y “El Gordo”, jugaron un papel clave en la ejecución del ataque. Según el informe preliminar, “El Gordo” esperaba en una motocicleta para actuar junto a otro implicado, pero ¿cuál fue su relación con la víctima? ¿Eran sicarios contratados o parte de una red delictiva más amplia?
3. ¿Cómo se coordinó el ataque y quién está detrás?
La presencia de un capitán de la FARD como uno de los capturados pone en relieve una posible planificación militarizada del crimen. El uso de un vehículo, las rondas previas y la precisión en el ataque sugieren una coordinación meticulosa. ¿Hubo otras personas que participaron en la planificación? ¿Quién ordenó el asesinato?
4. ¿Por qué Junior Reyes Chalas fue el objetivo?
Otro de los aspectos pendientes es el motivo personal o profesional detrás del ataque. La víctima, un segundo teniente, aparentemente llevaba una vida normal, compartiendo con amigos en el momento del crimen. Las autoridades deberán determinar si su rol en la FARD tenía alguna conexión con el hecho.
5. ¿Dónde están los prófugos y cuál es su perfil?
A pesar de los esfuerzos de localización, Tommy Antonio Ortiz y “El Gordo” permanecen prófugos, y aún no se conoce información detallada sobre su historial criminal o posibles vínculos. ¿Son criminales reincidentes? ¿Se ocultan en redes delictivas?
La presión sobre las autoridades
El asesinato de Junior Reyes Chalas no solo ha generado conmoción en la sociedad, sino que ha puesto bajo presión a las autoridades para esclarecer el caso por completo. El Departamento de Delitos Complejos de la Fiscalía y la Dirección Central de Investigación (DICRIM) continúan las pesquisas, pero la opinión pública demanda respuestas más claras y la captura de los prófugos.