El dirigente empresarial llamó a que el proceso de investigación se lleve con rigor y debido proceso, pero también como punto de partida para replantear la prevención de futuros escándalos administrativos.
Santo Domingo.– El Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) reaccionó con ante las acusaciones de presunta corrupción que involucran al Seguro Nacional de Salud (SeNaSa), calificando el hecho como “grave” y advirtiendo sobre las debilidades persistentes en los sistemas de control estatal.
Durante una entrevista en El Despertador, el vicepresidente ejecutivo del CONEP, César Dargám, sostuvo que el caso va más allá de los montos señalados, debido a su impacto directo en el acceso a servicios de salud y, por tanto, en la vida de la población.
Dargán cuestionó la eficacia de los mecanismos de fiscalización vigentes, aun después de reformas legales y del fortalecimiento de la Ley de Compras y Contrataciones. A su juicio, lo ocurrido deja en evidencia “brechas” que deben ser corregidas con urgencia.
“¿De qué han servido estos mecanismos de control si al final del día todavía existen brechas?”, expresó, al señalar que la discusión no debe centrarse únicamente en la modificación de leyes, sino en su aplicación real.
El dirigente empresarial llamó a que el proceso de investigación se lleve con rigor y debido proceso, pero también como punto de partida para replantear la prevención de futuros escándalos administrativos.
Frente a cuestionamientos sobre el rol del sector privado en este tipo de irregularidades, el CONEP reiteró su postura de no respaldar a proveedores o empresas que violen la ley.
Dargám resaltó el lanzamiento de una plataforma de conducta empresarial responsable, basada en estándares de la OCDE, destinada a la autoevaluación del cumplimiento y a la promoción de una cultura ética dentro del sector corporativo.
Según explicó, el objetivo central es impulsar una cultura de cumplimiento y tolerancia cero a los actos ilícitos.
El vicepresidente del CONEP enfatizó que cualquier caso de corrupción debe ser llevado hasta las últimas consecuencias, con base en pruebas y respeto al proceso judicial.
“Si bien es cierto que la corrupción es grave… peor que la corrupción es la impunidad”, advirtió.