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Cretinismo: falta o déficit de la tiroides en el desarrollo fetal

Déficit físico

El cretinismo en muchas ocasiones es congénito, se nace con déficit en el funcionamiento del tiroides. Otras veces surgen por falta de yodo, que es imprescindible para que la glándula tiroides fabrique sus hormonas.

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REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El cretinismo es una enfermedad que se origina por la falta o la destrucción de la glándula tiroides durante el desarrollo del embrión provocando un importantes déficit físico y psíquico.

Según la Sociedad Española de Medicina Interna, es muy importante la pronta detección del cretinismo por medio de la prueba neonatal “para evitar estos daños y que la persona pueda llevar una vida absolutamente normal, aunque en ciertos casos es inevitable su progresión”.

El cretinismo en muchas ocasiones es congénito, se nace con déficit en el funcionamiento del tiroides. Otras veces surgen por falta de yodo, que es imprescindible para que la glándula tiroides fabrique sus hormonas.

Consecuencias del cretinismo

Ese déficit de la glándula tiroidea, si no se aborda a tiempo, puede tener consecuencias como:

Macroglosia, la lengua es demasiado grande para la boca.

Engrosamiento de la piel y poco pelo y frágil.

Cráneo grande en proporción a la cara, con la mandíbula grande.

Poco apetito, estreñimiento y reducción de la tolerancia al frío.

Latidos cardíacos lentos, rápidos o irregulares.

Confusión mental incluyendo depresión, psicosis o falta de memoria.

Retención de líquidos, especialmente alrededor de los ojos, expresión facial triste y párpados caídos.

Anemia, insensibilidad y hormigueo en pies y manos, voz ronca o profunda e hinchazón de piernas.

Según un artículo del investigador Juan Bernal, de la Universidad Autónoma de Madrid y CIBER de enfermedades raras, publicado en la Revista de Española de Endocrinología Pediátrica, “ la deficiencia de hormonas tiroideas motivada por déficit severo en la ingesta de yodo en la dieta causa bocio y cretinismo endémico, que han sido prevalentes en zonas extensas del planeta, llegando a afectar a extensas capas de población, e impidiendo gravemente el desarrollo económico y social de las regiones afectadas”.

“Los programas de yodación -prosigue- se han extendido por la mayoría de los países y se ha conseguido reducir en gran medida este problema”.

Tratamiento

Si es tratado con prontitud con hormonas tiroideas y con la adición de yodo a la dieta, se pueden apreciar progresos significativos, como en altura y desarrollo mental, añade la Sociedad Española de Medicina Interna.

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