SANTO DOMINGO.- República Dominicana suscribió hace unos años un protocolo global de alta relevancia para la minería.
Se trata de la Iniciativa para la Transparencia de la Industria Extractiva (conocida por sus siglas EITIE).
La transparencia en ese sector, especialmente en el manejo de los fondos mineros, es clave.
Tenemos años de oscurantismo y de manejo discrecional en ese sentido.
Si las comunidades mineras recibieron todo lo que les toca, distribuido desde las arcas del Gobierno, que es el recaudador, la imagen de la minería fuese otra.
Lo digo porque contextos sociales en donde hay calidad de vida, la percepción cambia,
En el pasado se avanzó consistentemente en esa iniciativa. Desconocemos su estatus, pero luciría que no es relevante en la agenda oficial.
Por otro lado, existe un anteproyecto de ley concebido para dar seguridad, cumplimiento y consistencia a la asignación de los fondos mineros a las comunidades.
Se trata de iniciativas que, puestas en práctica, constituyen los pivotes más importantes para una comunicación que tienda a cambiar percepción.
La comunicación por sí sola no hace milagros; se requieren buenas prácticas que permitan el desarrollo de narrativas que contagien en términos positivos.
Contar con algoritmos, inteligencia artificial, plataformas inteligentes y modelos de comunicación de avanzada, no es suficiente si no hay buenas prácticas.