SANTO DOMINGO.- El dirigente del Partido Revolucionario Dominicano, Rafael «Fiquito» Vásquez, aseguró este jueves que de continuar Miguel Vargas Maldonado al frente de esa organización política la misma será reducida hasta colocarse por debajo del Reformista.
Al participar en la entrevista central de El Despertador, Vásquez dijo que la situación «calamitosa, penosa y lamentable» en la que se encuentra el PRD, se debe principalmente a que en dos años y cuatro meses, el presidente del partido no se reúne con los dirigentes y sus comparecencias se circunscriben a grupos compuestos por sus seguidores.
El representante adviritó que «si Miguel sigue al frente del partido, inebitablemente», llegará a ser menos que el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), que en los últimos años ha visto reducir sus números en cada elección en la que participa, siempre acompañado de otro partido.
Lo que atribuye a que el dirigente y presidente del PRD no respeta la historia de los miembros de la organización, lo que aleja a una nueva generación, además que interfiere con el crecimiento y la credibilidad del partido.
Miguel Vargas está «circunscrito a reuniones grupales, de su grupo, de su seguidores y violenta y vulnera los derechos de compañeros que no comulgan con él», sin importar jerarquía, méritos, historia o vínculos que hayan mantenido con él en el pasado, expresó el director de Organización del partido blanco.
Indicó, además, que «no tiene una visión y una formación democrática», sino más bien una actitud «faraónica y dictatorial», que no permite el disenso, las discusiones y las contradicciones dentro de la organización política.
Al ser cuestionado sobre el momento de la ruptura de la relación entre ambos, Vásquez explicó que sucedió «cuando Miguel deja de convocar los organismos, cuando Miguel actúa de manera particular».
Rafael Vásquez considera «muy díficil» que él pase a las filas del Partido Revolucionario Moderno (PRM), pese a las diferencias que mantiene con el método y manejo de Vargas Maldonado del partido al que pertenece y aseguró que piensa «seguir echando el pleito aquí adentro».
Aseguró que el bloque contrario a Miguel Vargas y sus seguidores mantendrán la resistencia, pero de una manera cívica, pacífica y que van a recurrir a los medios necesarios para lograrlo, dentro del «marco de la prudencia, la decencia política y el debate con altura».