LeBron James
Redacción, EE. UU.- La hora de la venganza y la reivindicación llegó para los «Beach Boys» de los Heat de Miami que en su visita al Energy Solutions Arena, de Salt Lake City, vencieron por 98-111 al equipo local de los Jazz con el alero Lebron James y el escolta Dwyane Wade reivindicando su condición de estrellas.
James dominó por completo a la defensa de los Jazz y con 33 puntos, nueve asistencias y siete rebotes se convirtió en la gran figura individual del partido.
Wade lo apoyó al conseguir 28 puntos y el veterano pívot, el lituano Zydrunas Ilgauskas, recuperó su mejor versión para dominar bajo los aros con un doble-doble de 16 puntos y 10 rebotes, siendo el factor sorpresa del partido.
Mientras que el alero Chris Bosh hizo su trabajo al aportar 14 puntos, nueve rebotes y tres asistencias que dejaron a los Heat con 51.3 por ciento de acierto en los tiros de campo; el 45 (9-20) de triples y el 80 (20-25) de personal.
Si el ataque de los Heat estuvo imparable, la defensa comienza a tener consistencia y en el cuarto periodo fue decisiva cuando los Jazz se quedaron con 20 puntos por 34 para los Heat.
La victoria, la sexta consecutiva, mejor racha desde que llegaron James y Bosh a la franquicia de los Heat, dejó al equipo de Miami con marca ganadora de 15-8 y segundos en la clasificación de la División Sureste a sólo medio juego de los Magic de Orlando, que tuvieron jornada de descanso.
Pero lo más importante para los Heat fue vengarse de la derrota que sufrieron el pasado 9 de noviembre, en su campo del American Airlines Arena, cuando perdieron por 114-116 después de haber tenido 22 puntos de ventaja.
«Esta vez demostramos que como equipo vamos a más, que ya no hacemos concesiones y mucho menos que perdemos la concentración y la intensidad», declaró James. «Es un gran triunfo para nosotros ante un rival ganador».
Los Heat tuvieron hasta 12 puntos de ventaja, pero volvieron a verse abajo en el marcador con un parcial de 78-77 al llegar al cuarto periodo, donde consiguieron otra racha (13-2) que iba a ser la definitiva.
El base puertorriqueño Carlos Arroyo, que en el partido anterior había estado perfecto en los tiros a canasta, esta vez fue lo opuesto, después de jugar 23 minutos para irse en blanco al fallar todo (0-3, 0-1, 0-1) y recuperó un balón.
El pívot Al Jefferson con 25 puntos encabezó una lista de cinco jugadores –todos los titulares–, que al llegar al cuarto periodo ya tenían dobles dígitos para los Jazz (16-7), que perdieron el segundo partido en los últimos tres partidos que han disputado, aunque mantienen el primer lugar de la División Noroeste.
