La agenda impuesta por la difunta USAID

USAID y programas woke provocaron resistencias en instituciones y tradiciones culturales dominicanas, según análisis.

Santo Domingo.– En el Gobierno Obama-Biden, a la República Dominicana —a través de programas de la hoy felizmente desaparecida USAID— se le impuso un paquete de temas y lineamientos ideológicos que debían ser adoptados en conformidad con los criterios “woke” que ya se aplicaban dentro de los propios Estados Unidos.

Médicos, sociólogos, abogados, fiscales, jueces y funcionarios públicos dominicanos fueron entrenados bajo esos enfoques. Y aunque durante años este fenómeno fue visto como una simple exportación de políticas sociales estadounidenses, hoy se vuelve evidente que tales programas provocaron choques profundos con instituciones básicas, tradiciones culturales y valores históricos tanto en la República Dominicana como en otros países del mundo.

A continuación, dos ejemplos reveladores —uno internacional y otro estrictamente dominicano— muestran cómo estas agendas han generado resistencias, fracturas institucionales e incluso retornos a valores más sólidos y tradicionales.

¿Cuál es la situación actual del anglicanismo y el catolicismo?

1. ANGLICANISMO, CULTURA IMPERIAL Y CONVERSIÓN AL CATOLICISMO: UNA VERDAD QUE YA NO PUEDE OCULTARSE:

Durante más de un siglo, la relación entre la Comunión Anglicana y la Iglesia Católica ha estado marcada por tensiones doctrinales, debates éticos y diferencias profundas sobre la moral sexual cristiana. Pero hoy la realidad es imposible de ocultar: cientos de sacerdotes y obispos anglicanos han abandonado esa denominación para convertirse al catolicismo, impulsados en gran medida por su oposición a la progresiva aceptación de comportamientos incompatibles con la fe apostólica.

Un reciente informe del Benedict XVI Centre for Religion, Ethics and Society (Londres) confirma —con cifras documentadas— lo que la prensa secular británica prefería ignorar: más de 700 clérigos anglicanos se han convertido al catolicismo desde 1992 y un tercio de los nuevos sacerdotes católicos en Gran Bretaña provienen del clero anglicano.

I. La razón de fondo: el abandono de la moral cristiana tradicional.

Amplios sectores de la Iglesia Anglicana han abrazado posturas favorables a la práctica homosexual, al matrimonio entre personas del mismo sexo y a otras innovaciones que contradicen las Escrituras y la Tradición.

Los anglicanos africanos —Nigeria, Uganda, Kenia, Ghana— denunciaron públicamente que la Iglesia de Inglaterra había dejado de ser una referencia moral válida. Para ellos, el anglicanismo europeo se había secularizado hasta perder su esencia cristiana.

II. La herencia problemática del Imperio Británico:

Históricamente, diversos registros muestran que dentro de cuerpos militares británicos en múltiples colonias hubo prácticas de sodomía toleradas o ejercidas por tropas imperiales. Hoy resulta irónico que sectores anglicanos presenten como “progreso moral” lo que en tiempos del Imperio los pueblos colonizados recordaban como señal de decadencia cultural.

III. Más de 700 clérigos anglicanos se pasan a Roma.

Según el informe Convert Clergy in the Catholic Church in Britain:

– Más de 700 clérigos y religiosos convertidos desde 1992.

– 16 ex obispos anglicanos ahora católicos.

– Un tercio de los nuevos sacerdotes católicos proviene del anglicanismo.

IV. No se puede ocultar la verdad:

Los medios buscan silenciar que las comunidades cristianas más firmes están en África. Y que esas comunidades rechazan radicalmente la normalización de la práctica homosexual dentro de la vida religiosa.

V. Conclusión:

El catolicismo se mantiene como punto de referencia moral mientras la Comunión Anglicana se fractura. La historia muestra que cuando una institución abandona la verdad, pierde fieles; cuando la sostiene, atrae a quienes buscan autenticidad. Por eso tantos sacerdotes anglicanos llaman hoy a las puertas de Roma.

    ¿Cómo reaccionan las Fuerzas Armadas dominicanas ante la sentencia del Tribunal Constitucional?

    2. “SE ACATA, PERO NO SE CUMPLE”: LAS FUERZAS ARMADAS Y LA SENTENCIA DEL TC SOBRE RELACIONES HOMOSEXUALES

    La sentencia TC/1225/25 del Tribunal Constitucional, que elimina la penalización de la “sodomía” en los códigos de justicia militar y policial, generó un intenso debate institucional. Las declaraciones del ministro de Defensa y del director de la Policía Nacional revelan la tensión entre tres niveles: la norma constitucional, la disciplina castrense y las tradiciones institucionales.

    BALAGUER Y UNA FRASE QUE REGRESA:

    Las reacciones evocan la conocida frase de Joaquín Balaguer: “Las leyes se acatan… pero no siempre se cumplen.”

    Hoy, las Fuerzas Armadas y la Policía parecen aplicarla al pie de la letra.

    LO QUE DIJO EL MINISTRO DE DEFENSA

    El ministro Carlos Fernández Onofre afirmó:

    “Somos respetuosos de la independencia de los poderes del Estado, pero las Fuerzas Armadas mantienen su código disciplinario”.

    El mensaje implícito:

    – No habrá sanción penal.

    – Pero la disciplina interna no será modificada automáticamente.

    – Lo antes penal, ahora será disciplinario.

    LA POLICÍA NACIONAL EN LA MISMA LÍNEA

    El mayor general Guzmán Peralta declaró:

    “Somos obedientes a la Alta Corte, pero la Policía tiene sus normas”.

    Esto significa:

    – La sentencia se respeta.

    – Pero los reglamentos internos siguen vigentes.

    ¿QUÉ SIGNIFICA “MANTENER EL CÓDIGO DISCIPLINARIO”?

    En la práctica:

    – No habrá procesos penales por orientación sexual.

    – Pero sí sanciones disciplinarias por actos considerados “faltas al decoro” o incompatibles con la disciplina militar.

    CONCLUSIÓN FINAL

    Las instituciones armadas acatan formalmente la sentencia del Tribunal Constitucional, pero ajustan su aplicación según su propia cultura y disciplina interna.

      Exactamente como en la frase balagueriana que vuelve a cobrar vida:

      Se acata, pero no se cumple.”