La justicia dominicana debe actuar sin privilegios ante incidentes de abuso y violencia en La Vega.
Santo Domingo.– Lo ocurrido en La Vega refleja una peligrosa mentalidad: la de quienes creen que tener algún tipo de poder, estatus o influencia los coloca por encima de la ley.
Amenazar a ciudadanos con una escopeta en plena vía pública no es valentía ni autoridad, es abuso, intimidación y una muestra clara de desprecio por la convivencia y el orden.
Este tipo de conductas alimenta la cultura del miedo y la impunidad que tanto daño hace al país.
La justicia debe actuar con firmeza, sin privilegios ni contemplaciones.
La ley no puede ser selectiva: o se respeta para todos, o deja de existir como garantía social.