Nélsida Marmolejos.
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Directora de la Dirección de Información y Defensa de los Afiliados a la Seguridad Social (DIDA), Nélsida Marmolejos, declaró que frecuentemente los afiliados tienen dificultades para obtener la cobertura en medicamentos ambulatorios o procedimientos sencillos, lo que evidencia que hace falta mayor transparencia en la prestación de los beneficios contemplados en Plan de Servicios de Salud.
“En la DIDA tenemos denuncias dramáticas de afiliados al Régimen Contributivo que han tenido que ir a hospitales públicos porque no le brindan un servicio en una clínica, en esos centros, muchas veces niegan la asistencia a los afiliados porque no hicieron un depósito cuando la ley establece que las emergencias son gratuitas”, expresó Nélsida Marmolejos.
Dijo que tiene la esperaza de que el nuevo gobierno, que se ha comprometido a extender la protección social, asigne el próximo año un mayor presupuesto a la DIDA a los fines de que la institución pueda tener una ventanilla en todos los centros de salud para asistir a los afiliados en caso de dificultades para obtener la cobertura.
Consideró que los afiliados tienen que empoderarse de sus derechos frente a las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS), debido a que estas entidades son las encargadas de contratar a los centros de salud para garantizar que los afiliados reciban las prestaciones establecidas en el Plan de Servicios de Salud, por eso, si el paciente tiene alguna dificultad debe reclamar, en primer lugar, ante su ARS, la cuál tiene la facultad de presionar al centro de salud para que cumpla con las disposiciones de la ley.
Agregó que algunas veces las Administradoras de Riesgos de Salud no reconocen el derecho del afiliado y ante esta circunstancia la ley 87-01 concede el derecho a recibir asistencia de la DIDA hasta la resolución del caso.
La Directora de la DIDA explicó que cuando la decisión de una Administradora de Riesgos de Salud (ARS), no favorece a los afiliados, estos acuden a la DIDA, quien busca una solución entre las partes; en caso de no resolverse la situación, la DIDA somete el caso ante la SISALRIL, que está encargada legalmente de garantizar los derechos de los afiliados, para que actúe en consecuencia.
Si la decisión de la SISALRIL no satisface al afiliado ni a la DIDA, entonces ésta recurre ante el Consejo Nacional de Seguridad Social (CNSS), para que conozca el caso en última instancia, siendo sus decisiones inapelables.
