Expresión conocida “la salud y la enfermedad entran por la boca”. No es una simple frase. La misma refleja una realidad palpable que acaba de recibir confirmación con los reveladores datos obtenidos a través del estudio “La Comida Insana en la República Dominicana”, que fueron dados a conocer ayer por “La Alianza por la Comida Saludable”, que integran seis instituciones vinculadas al área de la salud y a los trabajadores del campo.
El estudio evidencia que alrededor del veinte por ciento de las muertes que tienen lugar cada año en nuestro país, están directamente relacionadas con perjudiciales hábitos de nutrición. Es decir que una de cada cinco personas que fallece es a causa de la ingesta de comida procesada con alto contenido de grasas trans que son las que provocan altos índices de colesterol malo, mas el añadido de azúcar y de sal también en cantidades excesivas.
Si bien la expectativa de vida en el país ha crecido en los últimos años, también se ha incrementado en mayor medida la de los fallecimientos que en ese mismo período han aumentado en un 57 por ciento, tal como apunta la investigadora Celeste Solano quien participó en el orientador trabajo de investigación.
Fungiendo como vocero de la Alianza, Solano advierte que la mala alimentación aparece como elemento de de gran incidencia en los cinco principales factores que afectan la salud. Estos son: alta presión arterial, glucemia alta, o sea, nivel de azúcar en la sangre, elevados índices de colesterol que tienden a taponar las arterias coronarias provocando el colapso cardíaco, obesidad y sobrepeso.
Y una advertencia importante: el primero de esos factores, o sea, la presión arterial elevada afecta a 3 millones y medio de dominicanos, o sea, uno de cada tres, muchos de los cuales ignoran que padecen de esa condición, y por consiguiente, no reciben el necesario tratamiento de control.
En base a los datos recolectados, el estudio establece que del 40 al 55 por ciento de las dolencias cardiovasculares pueden atribuirse a una mala inadecuada alimentación. Esta está presente también en el 45 por ciento de los casos de diabetes que en nuestro país afecta a no menos de diez de cada cien y entre un 30 a un 40 porciento de los cánceres del estómago y el colon.
Que el dominicano por término medio se alimenta mal está a simple vista. No estamos hablando precisamente de la cantidad sino del tipo de comida que se ingiere. Demasiado frito y refrito, muchas veces con aceites recalentados y con alto contenido en grasa; exceso de carne roja; pocos vegetales y escasa fruta; leche entera; exagerada cantidad de azúcar; demasiada sal. Y cada vez menos alimentos crudos cocidos que son sustituidos por enlatados, precocidos, snacks, jugos envasados en vez de naturales y la llamada “comida chatarra”, a la que le cuadra muy bien el apelativo.
El estudio que comentamos ha puesto en perspectiva de números y porcentajes los efectos perjudiciales a la salud y el acortamiento del tiempo de vida provocados por la mala nutrición.
Es por consiguiente, un llamado a la alimentación sana. Porque está comprobado hasta la saciedad que la salud entra realmente por la boca y depende en gran medida de lo que comemos.