SANTO DOMINGO.- Los restos mortales de Ana Emilia Abigail Mejía Solière, pionera del movimiento sufragista de vanguardia, intelectual y organizadora del Voto de Ensayo en 1934, descansan ya en el Panteón de la Patria. Luego de una serie de actos desarrollados desde inicios del mes de septiembre que culminaron con esta actividad solemne encabezada por el presidente de la República Luis Abinader y la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez.
Abigail se convierte en la séptima mujer en ocupar un lugar en el Panteón de la Patria. ¿Sabe usted cuáles son las otras seis féminas destacadas de la historia nacional que le acompañan?
En el pasillo de la Nave Sur se encuentran los restos de la poetisa y educadora dominicana Salomé Ureña Díaz de Henríquez.
Nació el 21 de octubre de 1850 en Santo Domingo. Fue una de las figuras centrales de la poesía lírica del siglo XIX e innovadora en la educación de las mujeres en el país, influenciada por la escuela positivista y la educación normalista de Eugenio María de Hostos, de quién fue alumna aventajada. Sus obras se centraron en el amor a la patria y en su entorno familiar.
El 11 de febrero de 1880, a la edad de veintinueve años, se casó con el doctor y escritor Francisco Henríquez y Carvajal, político que alcanzó la presidencia de la República. Tuvo cuatro hijos con él.
Murió debido a complicaciones de tuberculosis en 1897, a la edad de 46 años. Fue enterrada en la iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes y trasladada en 1972 al Panteón de la Patria. Es considerada por muchos como la mejor escritora de la República Dominicana. El 21 de octubre fue declarado «Día del Poeta» en su honor.
Nació el 16 de junio de 1794 en Santo Domingo. En la pared sur del Altar Mayor está su placa, es considerada Madre de la Patria. Fue una separatista dominicana quien con la ayuda de otra integrante del Panteón de la Patria, Concepción Bona, confeccionó la primera bandera dominicana. Era tía de uno de los padres de la patria, Francisco del Rosario Sánchez.
Formó parte del Movimiento La Trinitaria, a pesar de ser mujer y de tratarse de un tema en ese entonces considerado para hombres. Alojó en su casa a los descendientes del general Pedro Santana, que se escondían del gobierno haitiano.
Mientras los hombres independentistas estaban al frente de la guerra, la noche histórica del 27 de febrero de 1844, ella y otras mujeres fabricaban cartuchos que fueron utilizados por los trinitarios para atacar al gobierno haitiano.
Transportó pólvora, bajo su falda, para cargar municiones durante la batalla separatista que buscaba la separación del pueblo haitiano, ayudando así a que los soldados estuviesen preparados para atacar y defenderse.
Fue una de las primeras personas apresadas, al descubrirse la insurrección que intentaba por todos los medios legales que los defensores de la Independencia, que habían salido exiliados del país por Santana, pudieran volver. Fue víctima del primer crimen político en la historia dominicana.
El 27 de febrero de 1845, al cumplirse el primer aniversario de la fundación de la República, se ejecutó la sentencia. María Trinidad Sánchez caminó desde la Fortaleza Ozama hasta el cementerio, donde fue fusilada, y al pasar por la Puerta del Conde exclamó: «Dios mío, cúmplase en mí tu voluntad y sálvese la República”.
Sus restos están también en la pared sur del Altar Mayor. Nació en 1825, en Santo Domingo. Fue la esposa del Padre de la Patria, Francisco del Rosario Sánchez. Se casó con él un 4 de abril de 1849 y procrearon dos hijos.
Por haber sido la esposa del héroe, sufrió persecución, cárcel y exilio. Apoyó sin reparos al patricio en sus luchas políticas contra los gobiernos corruptos.
Murió en Santo Domingo a la edad de 70 años, el 26 de abril de 1895. Sus restos fueron exaltados en el Panteón Nacional en el año 1974.
También llamada Rosa Cruz, se encuentra por igual en la pared sur del Altar Mayor del Panteón de la Patria. Nació el 15 de agosto del 1830. Fue hermana del Patricio Francisco del Rosario Sánchez y sobrina de María Trinidad Sánchez.
Fue una educadora, independentista y periodista dominicana, conocida como defensora de los derechos de la mujer a recibir educación y considerada por los historiadores dominicanos como una de las pioneras del periodismo y de la lucha feminista en el país. Fundó la primera biblioteca para mujeres y creó dos centros de enseñanzas.
Con su familia sufrió los atropellos de las autoridades haitianas por la participación de Francisco del Rosario Sánchez en la lucha por la creación de la República Dominicana. Su fiel apoyo a las acciones independentistas de su hermano le costó la cárcel por un año y posteriormente el destierro con destino a Saint Tomas.
En sus esfuerzos por incluir a la mujer en el estudio superior, concibió la creación de una cátedra de derecho para que la mujer dominicana pudiera ejercer como abogada.
Sánchez logró varios de sus objetivos en el ámbito de la educación y murió en Santo Domingo el 26 de marzo de 1899 a la edad de 69 años, sin dejar descendientes.
La última integrante de la pared sur del Altar Mayor es Rosa Duarte. Nació en Santo Domingo el 28 de junio de 1820. Fue la hermana menor del patricio Juan Pablo Duarte.
Fue una mujer entregada a la causa patriótica de su hermano Juan Pablo, siendo una activa miembro de la sociedad secreta, político-militar, independentista, denominada La Trinitaria.
Junto a sus amigas, participó en las obras teatrales que se presentaban en el edificio de la Cárcel Vieja, situado al lado del Palacio de Borgellá, frente al Parque Colón, desde las que se creaba conciencia sobre la causa independentista. Con estas obras teatrales reunían recursos con el fin de comprar municiones y cubrir los gastos de la causa independentista dominicana.
En 1845 es condenada al destierro fuera de su patria, deportada junto a su madre y hermanos, abandonando así a su prometido, Tomas de la Concha, quien fue fusilado en 1855 junto a Antonio Duvergé.
El 26 de octubre de 1888 fallece en Caracas, Venezuela a causa de disentería. 12 años después de la muerte de su hermano, Juan Pablo Duarte.
Los restos de María de la Concepción Bona y Hernández se encuentran en la pared norte del altar. Nació un 6 de diciembre de 1824. Fue una educadora en la escuela de párvulos que regenteaba su primo Pedro Alejandrino Pina García y activista dominicana del siglo XIX. Confeccionó la primera Bandera Dominicana junto a las demás Madres de la Patria, María Trinidad Sánchez, Isabel Sosa y María de Jesús Pina.
Según los historiadores dominicanos, fue ella misma quien entregó el lienzo tricolor al esposo de su prima Josefa Brea Hernández, el general, padre y prócer de la patria Ramón Matías Mella, en la Puerta de La Misericordia. Tenía apenas 19 años de edad.
Falleció el 2 de julio de 1901 en Santo Domingo, a los 76 años de edad.
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