Acosta: "La violencia de género no es biológica; es cultural y estructural"

Santo Domingo.– En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el experto en violencia de género y académico Miguel Lorente analizó la situación de la violencia contra las mujeres durante una entrevista en el programa El Despertador, donde resaltó que este problema no es individual, sino el reflejo de una cultura androcéntrica que mantiene privilegios y estructuras que permiten justificar la agresión.

¿Cuál es el contexto general de la violencia contra las mujeres en República Dominicana?

Lorente señaló que, aunque la República Dominicana registra una reducción preliminar del 30% en los feminicidios con 49 casos reportados este año, este indicador no debe ser considerado como una señal definitiva de avance. Recordó que el feminicidio es "la expresión más grave" de una trayectoria de violencia prolongada y nunca un hecho aislado.

Durante la conversación en El Despertador, enfatizó la necesidad de reforzar la detección temprana de la violencia, especialmente en el sistema sanitario.

Explicó que la violencia física y psicológica provoca un estrés crónico que deteriora la salud de las mujeres, quienes suelen acudir con más frecuencia a consultas médicas sin que la violencia sea identificada. Estudios citados por Lorente apuntan a que las mujeres que sufren violencia tienen un 40% más riesgo de morir por causas como infartos, enfermedades cardiovasculares o diabetes tipo 2.

¿Qué propuestas y análisis ofrece Miguel Lorente para enfrentar la violencia de género?

El especialista sostuvo que la violencia de género "refleja la situación de toda una cultura", ya que incluso los hombres que no maltratan se benefician de los privilegios del sistema.

Destacó que la experiencia de España demuestra que una combinación de política integral y narrativas responsables desde los medios de comunicación fue clave para reducir estos crímenes. En ese país, explicó, abandonar expresiones como "crímenes pasionales" ayudó a generar conciencia social y a transformar la mirada sobre la violencia.

Lorente también defendió la perspectiva de género como una herramienta para corregir desigualdades, aclarando que no implica un ataque a la familia, las creencias ni las instituciones. Añadió que no existe una base biológica que determine la violencia masculina, y que factores como la testosterona no son causas, sino consecuencias de situaciones de agresión.

Finalmente, señaló que la prevención debe centrarse en transformar la masculinidad cultural, educar desde el hogar y desmontar los mitos que legitiman la violencia. "La violencia no surge de la desviación, sino de la normalidad que establece la cultura", afirmó, al insistir en que solo un enfoque integral permitirá erradicarla.