El beneficio de la gracia navideña dominicana 2024 estará vigente hasta el 15 de enero, facilitando el regreso de dominicanos para las fiestas.
AILA Santo Domingo.– Los aeropuertos dominicanos vuelven a llenarse de abrazos, sonrisas, llantos y equipajes repletos de regalos. Desde hace tres días, los criollos que regresan desde Estados Unidos, Europa y otros países empiezan a beneficiarse de la tradicional Gracia Navideña.
Un incentivo que permite entrar al país mercancías libres de impuestos por un valor de hasta US$5,500, siempre que el viajero haya permanecido al menos seis meses fuera de la República Dominicana.
Entre maletas y reencuentros, muchos dominicanos destacaron que aprovecharon el beneficio para traer ropa, artículos personales y obsequios para sus familiares.
“Le traje un par de ropitas, cositas… tú sabes, regalitos buenos”.
Comentó uno de los viajeros al llegar. Otros, igual de entusiasmados, confirmaron que la gracia “está bien” y que resulta un alivio económico en esta época de gastos.
Sin embargo, no todos tuvieron un proceso sin contratiempos. Un pasajero expresó su frustración al enterarse demasiado tarde de que no está permitido ingresar pavos ni cerdos, pese a que formaban parte de los regalos que traía para su comunidad y su familia. “Esa era la gracia que yo traía”, lamentó.
Ante esto, el Director General de Aduanas Eduardo Sanz Lovatón, aclaró que el Ministerio de Agricultura no lo permite y en dado caso, esto requiere permisos previos:
Importar carnes, aves o animales vivos requiere permisos especiales emitidos por el Ministerio de Agricultura, a través de licencias autorizadas de importación. Sin esos permisos, la mercancía puede ser devuelta, incinerada o confiscada.
Esta regulación busca proteger la agropecuaria nacional contra plagas, enfermedades y riesgos sanitarios. Siendo así, la Gracia Navideña no exonera regulaciones sanitarias: su beneficio aplica solo para bienes de consumo personal, uso civil o regalos, no para mercancías reguladas como carne o animales.
Además, el Ministerio también prohíbe ingresar cualquier tipo de plantas, semillas, raíces, rizomas, bulbos, flores o partes vegetales, así como frutas y vegetales frescos. Esto incluye plantas vivas o muertas.
Mientras tanto, la emblemática puerta de llegada del aeropuerto sigue cumpliendo su función: dar la bienvenida a turistas y recordarles a los dominicanos que, al cruzarla, vuelven a casa.