EEUU, la Unión Europea (UE) e Israel… tienen por preferido el terrorismo de Estado, de ejércitos y policías, de CIA y MOSSAD, de corporaciones transnacionales, de las clases dominante-gobernantes en los países periféricos-dependientes, de sus instrumentos paramilitares y parapoliciales. Es el terrorismo practicado por sus Estados y gobiernos, disfrazado y aplaudido por su avasallante dictadura mediática.
Tanto lo prefieren que a sus guerras “preventivas” e “infinitas”, a sus intervenciones militares, a sus dictaduras y “democracias” corruptas y asesinas… a sus masacres, genocidios, bombardeos, guerras químicas, envenenamientos, empobrecimientos, desigualdades, saqueos, colonizaciones, ocupaciones caóticas, destrucciones y aplastamientos de ciudades y países, no lo llaman terrorismo sino acciones “anti-terrorista” por la libertad y la paz.
La historia moderna no conoce un terrorismo que haya producido más horrores, muertes, mutilaciones, daños, destrucciones, sufrimientos… que la llamada “guerra global anti-terrorista”, precedida de brutales intervenciones militares en África, Asia, América Latina y El Caribe… de las guerras de baja, mediana y alta intensidad contra el “tercer” y “cuarto” mundo, de las dictaduras militares y “democracias restringidas”, montada y apoyadas por la metrópolis imperialistas.
Pero nada de eso cuenta. Tampoco el rol de la CÍA en el origen y la manipulación de Al QEDA y el Estado Islámico (ISIS), ahora relativamente fuera de su control. Ni el atroz empobrecimiento que genera el coloniaje, las migraciones masivas y los desplazamientos forzados de millones de desvalidos; agravados dramáticamente por sus bombardeos indiscriminados, guerras bioquímicas, atizamientos de la violencia sectaria, destrucciones y saqueos en Libia, Irak, Palestina, Siria, Afganistán, Ucrania… y la tragedia humana provocada en África y el Medio Oriente.
Al parecer sus innumerables bases militares, “drones”, flotas navales, la OTAN y PENTÁGONO son más pacíficas que la Madre Teresa. Nunca han sido fuentes de miedo y de terror, sino de amor…El único terrorismo existente es el que sufren los pobladores de Inglaterra, Alemania, España, Bélgica, Holanda, EEUU…como consecuencia de una reacción aberrante y criminal (por indiscriminada) de ALQEDA, ISIS y otras redes de acción nutridas por el fundamentalismo islámico históricamente discriminado por la llamada civilización occidental.
Siglos de opresión y un presente saturado de sufrimientos han generado esa dolorosa contrapartida criminal, por lo que estamos seguros de que si cesa el terrorismo de las grandes potencias y del gran capital contra pueblos y países víctimas de su saqueo, opresión y discriminación, las prósperas urbes europeas y estadounidenses dejarán de ser blancos de ataques del terror inducido que hoy las estremece.