Santo Domingo.-En medio de la creciente violencia de pandillas en Puerto Príncipe, la capital haitiana, Estados Unidos ha decidido evacuar parte de su personal diplomático y ha restringido sus operaciones debido a la recrudescencia de la violencia de pandillas cerca de sus instalaciones y el aeropuerto.
Asimismo, la dimisión exigida del primer ministro Ariel Henry, quien está ausente, agrega tensión a la ya volátil situación, el cual se encuentra diariamente en enfrentamientos entre la policía y bandas armadas en el vecino país.
Por lo que la Comunidad del Caribe (Caricom) convocó a una reunión de emergencia con representantes internacionales en medio del nuevo brote de violencia, debido a esto el Consejo de Seguridad de la ONU acordó enviar una misión encabezada por Kenia para ayudar a la policía haitiana.
Haití, actualmente sin presidente ni parlamento desde 2016, se enfrenta a una profunda crisis política y social. La situación ha llevado a la evacuación parcial del personal de la embajada de Estados Unidos, mientras las administraciones y escuelas permanecen cerradas, y el aeropuerto y el puerto han dejado de funcionar.
La atención sanitaria también está en riesgo, con hospitales atacados y personal médico y pacientes evacuados. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informa que más de 362,000 personas, más de la mitad, niños, están actualmente desplazadas en Haití, un aumento del 15% desde principios de año.
A causa de esto, el Papa Francisco ha expresado su preocupación por la «grave crisis» y ha instado a todas las partes a trabajar por la paz.
