El famoso rapero estadounidense Kanye West compró una nueva casa justo frente a la mansión de Los Ángeles donde vivía con su ex, Kim Kardashian, y para ello pagó 4,5 millones de dólares.
El nuevo hogar de Kanye fue construido en 1955 y Cosmopolitan lo describe como «arquitectónicamente poco notable», con cuatro dormitorios, dos baños, además de un estudio de invitados que tiene otra habitación y baño adjunto al garaje.
También hay moqueta de pared a pared, por lo que el ambiente de la casa parece muy ochentero, de ahí que el cantante planee renovarla. Según fuentes cercanas al artista, la idea es estar cerca de Kim y de los cuatro hijos que tienen en común: North West, de 7 años; Saint, de 5; Chicago, de 3; y Psalm, de 2.
La mansión en la que ahora solo vive la más famosa del clan Kardashian pertenecía a la pareja, que está en pleno proceso de divorcio. Sin embargo, en octubre pasado Kim pagó a Kanye 23 millones de dólares por su mitad de la propiedad.
Por lo visto, al rapero le interesa ampliar su patrimonio inmobiliario en California, pues compró recientemente una casa en Malibú del famoso arquitecto Tadao Ando, por la que pagó 57,3 millones de dólares. Así que está claro que le apetece gastar a lo grande.
A pesar de la separación, Kanye y Kim han tratado de permanecer en buenos términos. Todo eso en medio de declaraciones sobre las infidelidades de West a la socialité.
En una canción de su último álbum, el rapero insinuó que había cometido varios deslices durante su matrimonio con la también empresaria. «Aquí estoy haciendo como que soy demasiado rico, con una chica nueva, y sé que la verdad es que seguir jugándomela después de dos niños es mucho para digerir cuando tu vida no para de moverse», refieren algunos de los versos del quinto sencillo del disco Hurricane.
