REDACCIÓN.- El Ministerio de Asuntos Exteriores de China ha expresado su protesta contra las sanciones que, al amparo de la ley Magnitski, EE.UU. ha impuesto al exempleado del Ministerio de Seguridad Pública chino Gao Yan. Pekín exhorta a Washington a dejar de inmiscuirse en los asuntos internos y en la soberanía jurídica de otros países.
«Manifestamos nuestra rotunda desaprobación y protesta ante la imposición por parte de EE.UU. de las llamadas sanciones a ciudadanos de otros países basándose en su legislación interna», dijo la portavoz oficial de la Cancillería china, Hua Chunying, en una rueda de prensa.
De esta manera las autoridades chinas han reaccionado ante la reciente decisión del Departamento del Tesoro estadounidense de ampliar la aplicación de la denominada ley Magnitski global de responsabilidad por derechos humanos incluyendo en su lista negra a 13 personas de distintas nacionalidades.
Gao Yan, el único ciudadano chino que aparece en esta lista ampliada, dirigió la delegación de la Oficina de Seguridad Pública de Pekín en el distrito de Chaoyang. Según informa el comunicado oficial estadounidense al respecto, en 2014, cuando Gao ocupaba el cargo, el activista local de derechos humanos Cao Shunli murió a causa de un coma durante una detención, con «signos de demacración y abandono».
Además de Gao, entre los nuevos sancionados se encuentran el jefe policial birmano Maung Maung Soe (por la presunta persecución de los rohinyás), un hijo del fiscal general de Rusia, una hija del expresidente de Uzbekistán Islam Karímov, el exjefe del regimiento de Kiev de las fuerzas especiales de Ucrania, entre otras personas. La mayoría de ellas no desempeñan cargos oficiales en la actualidad.
