SANTO DOMINGO.- El presidente del Tribunal Constitucional, Milton Ray Guevara, reconoció el valioso aporte que realizan los dominicanos y dominicanas que día a día emprenden su jornada en favor de sí mismos, sus familias y de nuestra Patria.
El trabajo ya no es solo el medio a través del cual el ser humano busca suplir sus necesidades; es además la vía para alcanzar sus objetivos y sentirse realizado.
Pero cuando esa faena diaria se complementa con el trabajo en equipo, estamos aprovechando la principal herramienta de convivencia interpersonal y de grupo a grupo que toca a la sociedad en su conjunto.
Distingo a aquellos ciudadanos que prestan sus habilidades individuales al servicio del bien común, aportando en sus respectivas áreas esa retroalimentación constructiva que coopera para el logro de los objetivos nacionales. Ellos son muestra de que, ante el impacto de las tecnologías, «las personas no somos fáciles de sustituir»; el corazón de un hombre y una mujer que pone amor a su trabajo jamás podrá ser desplazado por las máquinas, la robótica o la inteligencia artificial.
Hemos logrado grandes avances desde la Constitución de 1966 cuando en su artículo 8 se limitaba a consagrar la libertad de trabajo y encomendaba a la ley la regulación de la jornada, días de descanso, vacaciones, salarios, así como a reconocer la libertad de organización sindical, el derecho a la huelga y la participación de los trabajadores en los beneficios de la empresa. La Constitución de 2010 otorga rango constitucional a varios de los Principios Fundamentales del Código de Trabajo, así como a otras disposiciones de dicho Código, como la obligación del empleador de garantizar condiciones de seguridad, salubridad, la igualdad salarial, entre otras; esto sumado a la labor jurisprudencial que en protección de este derecho ha realizado el Tribunal Constitucional.
Propicia es la ocasión, para resaltar la notable labor que a favor de la justicia constitucional realizan los servidores constitucionales, generando gran impacto para la obra colectiva de nuestro pueblo en defensa de los valores y principios que consagra nuestra Constitución. A casi doce años de la creación del Tribunal Constitucional, me honra presenciar el resultado de ese esfuerzo mancomunado que, con mucho tesón, hemos logrado. Sin dudas, el rol que cada uno desempeña es vital para el cumplimiento de todos los logros que hoy podemos exhibir.
El TC tiene un clima laboral estupendo, así lo acredita el último estudio realizado; no podía ser de otra manera, si protegemos los derechos laborales de los ciudadanos, estamos obligados a hacerlo con nuestros servidores constitucionales. Hoy más que nunca se debe preservar y respetar la dignidad y los derechos de esos trabajadores en la sociedad, las empresas y en las instituciones públicas.
Trabajadoras y trabajadores, servidoras y servidores constitucionales, no fallezcan nunca en la intención de transformar sus prácticas y mejorar continuamente sus capacidades para que puedan asumir siempre con gallardía las principales oportunidades y desafíos que el futuro les depara.
A todos los trabajadores dominicanos, nuestra admiración y reconocimiento.
¡Feliz Dia del Trabajo!
