Santo Domingo.- En momentos en que Haití ya no cuenta con ningún funcionario electo en su gobierno central y cerca del 60 por ciento de Puerto Príncipe está controlado por bandas armadas, el gobierno dominicano llamó en dos escenarios internacionales de alto nivel a acudir con urgencia en ayuda de esa nación para pacificarla y comenzar el proceso electoral.
Al advertir que la situación de inseguridad de Haití no deja de agravarse, el presidente Abinader demandó durante la Séptima Cumbre de la Comunidad Latinoamericana y del Caribe (CELAC), en Argentina, que la comunidad internacional responda al llamado de ayuda del gobierno haitiano.
Ante sus homólogos de la región, incluido el primer ministro haitiano Ariel Henry, el mandatario solicitó además que la CELAC se convierta en un ente de mediación para lograr que Haití emprenda el proceso para convocar elecciones.
De forma paralela, el canciller Roberto Álvarez señaló durante una reunión especial del Consejo de Seguridad de Naciones en Nueva York que mientras no exista un apoyo internacional para Haití, se complica un manejo coordinado en la frontera, convirtiéndola en un foco de problemas trasnacionales.
De su lado, el embajador haitiano ante el Consejo de Seguridad, Antonio Rodrigue, urgió el envío de una fuerza militar internacional para ayudar a la Policía Nacional a tomar el control del país.
“No se puede perder más tiempo; la situación de inseguridad amenaza con agravarse cada día y de deteriorar aún más la situación de la población que está en apuros”, dijo, Antonio Rodrigue, embajador de Haití ante la ONU
Ese despliegue militar fue solicitado oficialmente el pasado octubre por el Gobierno haitiano y respaldada por el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, sin embargo el proyecto no se ha llevado a cabo a falta de encontrar un Estado dispuesto a liderarlo.
Según datos de la ONU, la violencia por parte de las pandillas en Haití alcanzó en 2022 niveles no vistos en décadas, con un fuerte aumento de los homicidios, con un total de 2,183, y 1,359 secuestros, más del doble que el año 2021.