SEÚL.- Corea del Sur y Estados Unidos acordaron hoy imponer nuevas normas para regular el envío de sustancias biológicas, después de que el Pentágono remitiera por error muestras vivas del bacilo de Ántrax a sus bases en el país asiático el pasado abril.
Seúl y Washington decidieron «fortalecer el mecanismo (del envío de muestras biológicas) para garantizar la salud de los surcoreanos y de las Fuerzas de EE.UU. en Corea del Sur (USFK)», indicó en una rueda de prensa a los medios locales el comandante Jang Kyung-soo, líder de la comisión conjunta que anunció hoy la decisión.
Las nuevas normas consisten en que las USFK deberán informar a Seúl del tipo, cantidad, uso previsto y datos sobre el envío y recepción de cualquier muestra de sustancias biológicas enviadas a sus bases, informó la agencia Yonhap.
Además, el Gobierno surcoreano tendrá derecho a solicitar una inspección de estos envíos, en cuyo caso el proceso se realizará de forma conjunta por funcionarios de ambos países.
Con esto, Corea del Sur y EE.UU. buscan evitar que se repita el escándalo destapado a finales de mayo, cuando se descubrió que un mes antes el Pentágono había enviado por error muestras vivas del bacilo de ántrax a la base militar surcoreana de Osan, al sur de Seúl.
Entre marzo de 2014 y marzo de 2015 se remitieron por error este tipo de muestras a al menos 88 laboratorios de EE.UU. y otros seis países (entre ellos Corea del Sur, Japón o Alemania), según reconoció Washington, que se comprometió a investigar para aclarar los hechos.
En la investigación efectuada en Seúl, los expertos concluyeron que la muestra fue destruida por completo y que no se puso en riesgo la salud de ninguna persona.
El envío erróneo de ántrax a Corea del Sur generó una especial polémica, ya que el régimen de Kim Jong-un en la vecina Corea del Norte acusó a EE.UU. de querer utilizar esta arma biológica para atacar a su país.
